Los investigadores, los agricultores y las instituciones agrícolas mundiales están adoptando cultivos largamente abandonados que prometen una mejor nutrición y mayor resiliencia al cambio climático.
Los científicos llevan décadas intentando desentrañar los intrincados misterios del apetito humano. ¿Están a punto de determinar finalmente cómo funciona este impulso básico?
Los beneficios de la edad de oro de la agricultura no se han repartido de forma equitativa. En lugar de aliviar la desnutrición, nuestra maravillosa cadena de suministro global está condenando a productores y consumidores de países en vías de desarrollo, incapaces de igualar los niveles de producción del resto del planeta
La histórica productividad de las variedades tetraploides de este alimento han provocado que ahora resulte extremadamente complicado aplicar mejoras. El agricultor Peter Imle intenta reducir a la mitad su cantidad de cromosomas para abrir el camino a muchas nuevas variedades con características más útiles
Nuevas tecnologías, como la edición genética, han aumentado la producción y la eficiencia de los alimentos, pero estos beneficios se han concentrado en los gigantes de la industria en lugar de garantizar la seguridad alimentaria y la sostenibilidad. La pandemia ha demostrado que la situación debe cambiar
Con solo el 1 % de su superficie destinada a producir alimentos, la COVID-19 ha dejado claro que el país debe reducir su dependencia de productos importados. Para paliar esta vulnerabilidad, emprendedores y autoridades han llegado a la misma conclusión: apostar por la agricultura urbana vertical
Al introducir letras de ADN bacteriano con una nueva ruta metabólica, estas plantas de tabaco tienen más energía para dedicar a su crecimiento, lo que aumenta su tamaño final. Si este resultado puede aplicarse a variedades alimenticias como la patata y la soja podría aumentarse el suministro mundial
Los algoritmos de Climate Corporation logran que cada hectárea de terreno produzca 20 fanegas más de cultivo. La empresa ofrece herramientas para que los agricultores puedan anticiparse a las plagas y sepan qué híbridos tendrán el mayor rendimiento en función de cada clima y momento
La visión de Fei Fang de combinar aprendizaje automático con la teoría de juegos ya se está aplicando para aumentar la seguridad del transporte marítimo, reducir la caza furtiva, detectar la minería ilegal, identificar préstamos abusivos y reducir el hambre, entre otras cosas