La producción de biocombustibles está limitada por el coste del azúcar, que se fermenta para producir etanol, y por la cantidad de azúcar que se puede producir en la tierra disponible. Proterro, una start-up cuyo objetivo es producir azúcar a precio ultra reducido y en gran volumen utilizando microorganismos fotosintéticos, afirma haber recaudado 3,5 millones de dólares (2,6 millones de euros) en una ronda de financiación liderada por Braemar Energy Ventures para continuar el desarrollo de su tecnología. Anteriormente había recaudado 5 millones de dólares (3,8 millones de euros).

Proterro espera reducir los costes y mejorar el rendimiento utilizando cianobacterias fotosintéticas diseñadas para secretar sacarosa de forma constante. Espera producir azúcar por cinco centavos de dólar la libra (3,8 céntimos de euro por cada 0,45 kilos), menos de un tercio del precio actual del azúcar. La compañía afirma haber demostrado en el laboratorio que, si el proceso se amplia, el rendimiento actual de su cianobacterias, que se cultivan en el interior de envases cerrados y transparentes, sería suficiente para producir azúcar en una cantidad 10 veces mayor por hectárea que usando caña de azúcar. Espera además poder seguir trabajando en el diseño de las bacterias para aumentar dicho rendimiento y llegar hasta una cantidad de azúcar por hectárea 30 veces mayor que con la caña de azúcar.

Existen otras compañías dedicadas al desarrollo de organismos fotosintéticos para la producción de biocombustibles, pero suelen hacer uso de la capacidad de las algas para producir aceite, no azúcar. Una de las dificultades de estos enfoques es que la recolección y procesamiento del aceite puede ser costosa. Es más, aunque los rendimientos por acre pueden resultar impresionantes, los recipientes, bombas y otros equipos necesarios para hacer crecer los microorganismos pueden ser costosos, por lo que el proceso general es antieconómico.

Proterro está intentando que su proceso sea económico, en parte mediante la reducción de la cantidad de agua necesaria. Para ello, ha desarrollado un diseño de fotobiorreactores, es decir, los envases transparentes usados para el cultivo de las bacterias y la cosecha de los azúcares, con los que poder cultivar cianobacterias en un tejido que se mantenga húmedo con solo la cantidad suficiente de agua y nutrientes para mantenerlas.

Uno de los retos del enfoque de Proterro es que los organismos, al excretar azúcar, crean un ambiente ideal para otros microorganismos que compiten por crecer. No obstante, Proterro indica que sus microorganismos han sido capaces de producir altos niveles de azúcar, incluso después de introducir a propósito microorganismos competidores en el fotobiorreactor para ver el resultado.