Una mina estadounidense empezará a estar completamente operativa a finales del próximo año.
Molycorp ha obtenido los permisos y el financiamiento necesarios para reanudar la producción en una mina de Mountain Pass, California, que se convertiría en la primera fuente estadounidense de elementos del grupo de las tierras raras en más de una década. La mina es uno de los yacimientos más ricos del mundo de estos elementos, que son fundamentales para la fabricación de componentes que se encuentran en una amplia gama de tecnologías. El martes, la empresa anunció que se asociará con Hitachi Metals de Japón para convertir los materiales de la mina en imanes de alta resistencia, los cuales son vitales en vehículos eléctricos, turbinas eólicas, y muchos otros productos.
Actualmente, China tiene controla el mercado de materiales de tierras raras: en 2009 proporcionó el 95 por ciento del suministro mundial, es decir, 120 mil toneladas. Esta concentración de la oferta se ha convertido en un problema importante en los últimos meses, especialmente después de que en septiembre China bloqueara temporalmente las exportaciones de estos materiales a Japón. Un documento de Estrategia de Materiales Críticos emitido la semana pasada por el Departamento de Energía de EE.UU. destaca el "riesgo de interrupción del suministro" a corto plazo. La demanda mundial de elementos del grupo de las tierras raras ha sido de 125.000 toneladas en 2010 y se espera que aumente hasta las 225.000 toneladas en 2015.
La mina consiste en un hoyo abierto de 50 acres situado a aproximadamente 50 millas de Las Vegas, rodeado de un paisaje austero de montañas de color marrón rojizo, árboles de Josué, y algún cactus ocasional. Molycorp ha comenzado a drenar el agua subterránea que se filtra a la parte inferior de la fosa y a eliminar las áreas de roca llamadas "sobrecarga" para exponer una capa de bastnasita, un mineral rico en elementos del grupo de las tierras raras. La expansión de las operaciones llevará la mina de una profundidad de 500 pies hasta los 1,000 pies en los próximos años.
Para el año 2012, se espera que la mina estadounidense renovada produzca alrededor de 20.000 toneladas de materiales de tierras raras por año. Molycorp tiene planeado utilizar nuevas técnicas de procesamiento que asegura que son más ecológicas y menos costosas que los métodos convencionales.
La mina de Mountain Pass solía ser el mayor proveedor del mundo de elementos del grupo de las tierras raras, pero en 2004 cerró, como consecuencia de una fuga de aguas residuales en 1998 y de la llegada de los proveedores chinos que ofrecían precios más bajos. (Una razón de la reducción de los precios es que casi la mitad de las tierras raras producidas en China se obtienen como subproducto de la minería de hierro.)
Este año, Molycorp espera vender cerca de 3.000 toneladas de tierras raras, producidas a partir de mineral almacenado antes de que la mina fuera cerrada. También se está preparando para la actividad minera, con el apoyo financiero de una oferta pública inicial de este verano y con la reciente inversión de la empresa japonesa Sumitomo.
La cantidad total de producción proyectada por la empresa podría satisfacer la demanda actual de tierras raras en los Estados Unidos. Molycorp no ha revelado quiénes serán sus clientes, pero, la semana pasada, su director general, Mark Smith, comentó en un recorrido por la mina que ya ha firmado contratos para vender el 25 por ciento de las 20.000 toneladas de material que espera producir durante el primer año de operación a plena escala, en 2012, y que dispone de cartas de intención para vender el resto. "Estamos concentrados en los EE.UU., Japón y los mercados europeos", afirmó él.
Después del 2012, bajo los permisos actuales, la empresa podría duplicar la producción, a 40.000 toneladas al año. Smith indica que es probable que la demanda supere a la oferta durante algunos años, aunque la mina Mount Weld de Lynas Corporation situada en las afueras de Perth, Australia, comienza la producción como se esperaba en verano de 2011. Esta empresa espera producir 15.000 toneladas de elementos del grupo de las tierras raras el año 2015.
Incluso con las materias primas aseguradas, los fabricantes de EE.UU. no puede producir muchas tecnologías importantes basadas en elementos del grupo de las tierras raras. La bastnasita de la mina Mountain Pass se puede procesar en el emplazamiento para obtener óxido de didimio, un polvo que contiene el elemento neodimio, el cual es fundamental para la producción de imanes permanentes ligeros. Sin embargo el óxido de didimio requiere un tratamiento posterior para obtener la aleación neodimio-hierro-boro de la que se producen los imanes. Los imanes que se encuentran en una turbina eólica requieren varios cientos de kilogramos de neodimio.
Actualmente, ninguna empresa en los Estados Unidos dispone de la capacidad tecnológica, o de las licencias de propiedad intelectual, para producir imanes de neodimio. Ayer, Molycorp e Hitachi metals anunciaron un acuerdo para producir estos imanes en los Estados Unidos; las dos empresas tienen planeado firmar un acuerdo definitivo antes de abril de 2011. Según el DOE, actualmente sólo 10 empresas, ubicadas en Alemania, Japón y China, cuentan con las licencias necesarias para producir este tipo de imanes. La propiedad intelectual corresponde a Hitachi Metals y a Magnequench, empresa que actualmente forma parte de AMR Technologies, empresa madre con sede en Canadá que en 1995 fue adquirida por un consorcio chino. Smith señala que la producción de aleaciones para la fabricación de imanes podría aumentar los márgenes de beneficios de la empresa en un 125 por ciento.
Un informe reciente publicado por el Servicio Geológico de EE.UU. estima que el total de reservas de tierras raras en los Estados Unidos es de 1,5 millones de toneladas. Sin embargo, el informe destaca que no está claro qué parte de estas reservas pueden ser minadas de forma económicamente rentable. El informe del DOE esboza una estrategia para diversificar la oferta internacional de tierras raras, identificar materiales alternativos, y encontrar maneras de utilizar y reciclar estos materiales de manera más eficiente. Equipos de investigadores de Hitachi, GE, y la Universidad de Delaware están colaborando en el desarrollo de un material magnético alternativo que requiere una menor cantidad de materiales de tierras raras, o que no contenga en absoluto. Sin embargo, este y otros proyectos similares todavía se encuentran en etapas primerizas.