El Grupo Futuro es un holding de empresas líderes en seguros, salud, turismo, agricultura digitalizada, energías renovables y logística. Hace cuatro años, a través de la Fundación Futuro, impulsó el Programa Carbono Cero para contrarrestar los efectos provocados por el cambio climático. Carolina Proaño-Castro, directora ejecutiva de la Fundación, señala que el programa busca promover la descarbonización de las empresas del Grupo, financiar la conservación de la biodiversidad y fortalecer las capacidades de adaptación de las comunidades vulnerables.

El proyecto se desarrolla en la Reserva de Biosfera del Chocó Andino de Pichincha, y cuenta con tres objetivos ambiciosos.  Al implementar estrategias de reducción de gases de efecto invernadero en las empresas del Grupo Futuro, consiguen diseñar e implementar mecanismos de financiación para ecosistemas de alta biodiversidad. De esta manera, también apoyan a las comunidades que rodean estos ecosistemas a través de la resiliencia y la sostenibilidad, fomentando su crecimiento.

En el año 2019, todas las empresas del Grupo habían alcanzado la neutralidad en carbono, e invertido en una serie de estrategias para reducir su huella. Bajo el esquema del Fideicomiso de Flujos Carbono Neutro, creado para la conservación y restauración de bosques, y gracias a la adopción de prácticas de manejo sostenible de la tierra, el Programa ha logrado compensar 38.434 T CO2eq en 7.166 hectáreas de bosque. Hasta el año 2020, la inversión fue de 556.026 dólares (516.060 euros). Además, en 2021, el Ministerio del Ambiente y Agua presentó el Programa Ecuador Carbono Cero (PECC) para incentivar la implementación de acciones para la cuantificación, reducción y neutralización de las emisiones de gases de efecto invernadero. Lo que refuerza la importancia de esta iniciativa en el marco medioambiental de Ecuador.

Según Proaño-Castro, este logro se debe en gran parte a los valores que se practican en todo el Grupo. “Esto solo es el comienzo, y la sostenibilidad va más allá de la neutralidad en carbono. Ahora, 12 de nuestras empresas han medido su desempeño utilizando la herramienta de Sistema B, que forma parte de nuestro compromiso con el desarrollo sostenible y es el punto de partida hacia la transformación en negocios con propósito sostenible”, afirma la directora ejecutiva.

Foto de izquierda a derecha: Carolina Proaño-Castro, directora ejecutiva de Fundación Futuro; Moisés Pascual, director de TI y Transformación Digital de Grupo Futuro y Juan Carlos Berrú, CEO de Grupo Futuro. Créditos: Cortesía de los entrevistados. 

Sin embargo, ¿cómo se puede expandir este programa de una forma responsable y eficiente? Mediante una estrategia eficaz y el potencial de las nuevas tecnologías. Aunque para Moisés Pascual, director de TI y Transformación Digital de Grupo Futuro, hay dos asuntos aún más importantes para impulsar una transformación integral a favor del cambio climático. Estos son el desarrollo de ideas en el directorio de las compañías para discutirlas y tomar decisiones; y pensar a lo grande. Es decir, diseñar acciones que permitan el éxito de ese proyecto.

De esta forma, nace NFTree, una iniciativa basada en tecnologías Web 3.0 que calcula la huella de carbono de las personas y empresas, y además permite compensarla de forma inmediata.

“Creamos una plataforma que integra ocho tecnologías distintas y que, orquestadas adecuada y estratégicamente, permiten generar valor a este token no fungible (NFT): NFTree”, resume Pascual. El director de Transformación Digital también está convencido de que se puede crear y generar riqueza sin destruir el medioambiente, con un impacto positivo para todos los stakeholders del ecosistema, como demuestra este proyecto.

NFTree está diseñada para ayudar al usuario a neutralizar su emisión de CO₂. Durante un año, la plataforma ayuda a preservar una cantidad determinada de bosques en las Reservas Mashpi-Tayra del Chocó Andino de Pichincha. Aquí la tecnología blockchain se convierte en una pieza fundamental para garantizar la transparencia y trazabilidad del carbono, y cuantificar el impacto de estas acciones de compensación. Por lo que, una vez realizada la compra del token, el usuario recibe un certificado de propiedad digital y autenticidad del área de bosque donde ha decidido compensar su huella. De esta forma, la Fundación asegura que esa parcela no vuelva a venderse a nadie más, y el individuo o la empresa puede monitorear el área en tiempo real.

“Somos una opción de compensación de alta calidad a nivel internacional. Adoptamos pautas y estándares del IPCC para medir y capturar los gases de efecto invernadero. Estos aseguran la solidez de la técnica para medir la huella de carbono de nuestras empresas y la capacidad de captura de los bosques que gestionamos. Así incentivamos a las compañías y las personas a tomar acciones frente al cambio climático mediante un esquema verificable, trazable, transparente y accesible”, asegura Proaño-Castro.

Al incorporar tecnología NFT, la Fundación Futuro transforma el uso intangible que se suele dar a estos tokens para agregar un valor tangible: la protección de hectáreas de bosque en el Chocó Andino de Pichincha. Al combinar tecnología de alto nivel, proporcionan al comprador la comodidad y la seguridad de contribuir a mitigar el cambio climático al ingresar en www.nftree.com.ec.

El impacto de la sostenibilidad

Según Juan Carlos Berrú, CEO de Grupo Futuro, si una empresa no considera un enfoque sostenible, dejará de ser rentable y terminará desapareciendo. Durante los últimos años, Berrú ha dirigido el rumbo del Grupo hasta posicionarlo como referente en innovación y sostenibilidad.

Los esfuerzos estuvieron encaminados a construir una economía regenerativa, redefiniendo el modelo de riqueza, dejando atrás la medición monetaria únicamente, y concentrándose en crear y aportar valor a sus grupos de interés. Como, por ejemplo: clientes, socios, proveedores, y también el Gobierno, el medio ambiente, la sociedad u otros colaboradores. Esta gestión se ha convertido en la oportunidad perfecta para aumentar la competitividad y la rentabilidad de la empresa a largo plazo.

Con un ánimo similar, Proaño-Castro, directora ejecutiva de Fundación Futuro, destaca que “tomar acción y adelantarse al cambio es clave para mantener la continuidad en el mercado, donde el factor diferencial está ligado al propósito de cada modelo de negocio, aquellas compañías que logran un impacto social y ambiental”.

En Grupo Futuro, las acciones dicen más que las palabras. Por eso, NFTree brinda a empresas e individuos la posibilidad de compensar el impacto de su huella de carbono de una forma puntera sostenible y segura. Ya que destinan hasta el 90% de los ingresos generados por la compra del token a la construcción de corredores ecológicos, la creación de medios de vida sostenible, y la conservación y ampliación del ecosistema en el Chocó Andino de Pichincha. Así, NFTree es una alternativa considerable para que las organizaciones sean más sostenibles.

No obstante, esta acción no va a conseguir que una empresa sea neutra en carbono, pero es un gran ejercicio de transformación y el camino hacia la descarbonización. Pues la apuesta por la sostenibilidad requiere de constancia. “Queremos sumar empresas grandes o pequeñas de diferentes industrias, del sector público y privado, ofreciéndoles un modelo de negocio sofisticado. En él se ve reflejado el largo trabajo que viene haciendo la Fundación Futuro. Además, tenemos expectativas de crecer y continuar aportando a la conservación, no solo del ecosistema de Ecuador, sino de otros ecosistemas de la región y el mundo”, concluye Pascual.

Lo que una tarde surgió entre estos líderes como una idea se ha convertido en uno de los proyectos insignia del Grupo y la Fundación. Un ejemplo de integración de modelos de negocio en las nuevas tecnologías. NFTree confirma que innovar no solo es inventar, sino actuar de manera diferente.