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Cambio Climático

La energía undomotriz pasa a mayor escala fuera de las costas de Escocia

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Diez proyectos undomotrices y mareomotrices generarán 1,2 gigavatios de potencia.

  • por Peter Fairley | traducido por Francisco Reyes (Opinno)
  • 25 Marzo, 2010

Escocia espera poder montarse en la próxima ola de energía renovable. La semana pasada el gobierno del Reino Unido otorgó licencias para la localización de varios proyectos de energía undomotriz y mareomotriz de gran tamaño, concluyendo así un proceso de licitación de dos años que ha despertado un gran interés por parte de las principales compañías eléctricas y emprendedores dedicados a la energía. Estas concesiones abren las puertas a seis proyectos de energía undomotriz y cuatro sistemas de energía mareomotriz alrededor de las Islas Orkney de Escocia, y que podrían en conjunto generar hasta 1,2 gigavatios, excediendo el objetivo de 700 megavatios del Reino Unido para la ronda de licitaciones. Esta es una escala inmensa para una industria que hasta ahora ha instalado sólo proyectos pilotos con únicamente un grupo de pequeños dispositivos.

“Esta industria está a punto de crecer,” afirma Martin McAdam, director general de Aquamarine Power, con sede en Edimburgo, y que consiguió unas instalaciones de 200 megavatios en asociación con la compañía eléctrica del Reino Unido Scottish and Southern Energy, actualmente el mayor generador de energía renovable en el país. La construcción de estos proyectos podría empezar en 2013.

Escocia ofrece mares extraordinariamente potentes, situados entre el Atlántico y el Mar del Norte, conocido por su estridencia. Las olas de la costa oeste de las Orkneys tienen unos dos metros de media y al año exceden los 10 metros. La energía marina podría proporcionar entre un 15 y un 20 por ciento de las necesidades de energía totales del país, según Carbon Trust, con sede en Londres, una entidad financiada por el gobierno y que apoya el desarrollo de iniciativas bajas en carbono. El Centro de Energía Marina Europeo (EMEC, en sus siglas en inglés) con sede en las Orkney, y que incluye unos bancos de pruebas, también proporciona recursos de investigación y desarrollo para estas iniciativas.

Si las tecnologías undomotriz y mareomotriz pudieran escalarse en las aguas de Escocia, los expertos en energía marina afirman que encontrarán potencial de sobra en otros lugares, de igual forma que las tecnologías de turbina iniciadas por Dinamarca en los años 70 y 80 se han expandido por todo el mundo. “Hay decididamente un mercado global tanto para la energía undomotriz como para la mareomotriz, y esa es razón suficiente para que las grandes compañías se interesen,” señala Amaan Lafayette, director de desarrollo marino en el gigante europeo de la energía E.ON, que consiguió 2 de las 10 licencias escocesas.

Los retos siguen siendo significativos. El primero consiste en probar que la tecnología está lista para el castigo que supone el mar abierto, donde muchos prototipos undomotrices y mareomotrices se han encontrado con grandes dificultades. Por ejemplo, los rotores de fibra de vidrio de los prototipos de turbina mareomotriz instalados en el East River de Nueva York en 2007 acabaron fracturándose debido a turbulencias inesperadas. Al año siguiente, Pelamis Wave Power sacó sus generadores de 750 kilovatios, y parecidos a serpientes, fuera de las aguas portuguesas debido a dificultades técnicas.

Neil Kermode, director de EMEC, reconoce que toda la industria está aún “trabajando para solucionar una enorme lista de retos técnicos.” No obstante también observa “un gran progreso” en Pelamis, que está ensamblando un segundo generador para E.ON y que será instalado en EMEC este verano. Lafayette desde E.ON está de acuerdo, y afirma que este progreso explica por qué la tecnología de Pelamis será utilizada en tres de las 10 instalaciones escocesas, incluyendo las de E.ON.

Otro reto, afirma Lafayette, es de la planificación ambiental. “Hay que hacer una evaluación ambiental específica para cada sitio y la tecnología específica que se va a usar allí,” señala. Un proyecto de energía mareomotriz que E.ON apoyó en Pembrokeshire pisó el freno este mes cuando el gobierno decidió incluir proyectos de energía marina dentro de una evaluación ambiental general del desarrollo fuera de las costas en Inglaterra y Gales.

Los retos técnicos y ambientales podrían, claro está, ralentizar a algunas tecnologías de energía marina en mayor medida que a otras. Eso es por lo que apuesta McAdam en relación al convertidor de ondas Oyster de Aquamarine, una aleta flotante de acero que utiliza la energía undomotriz para hacer funcionar un pistón hidráulico y enviar agua a alta presión a un generador de turbina en la costa. El diseño hace que no se coloquen piezas de movimiento rápido ni ningún elemento de generación de energía en el agua, y McAdam afirma que esto minimizará tanto los fallos técnicos como las amenazas contra la vida marina. Por el contrario, los dispositivos mareomotrices seleccionados por todos los desarrolladores de las Orkneys, fabricados por OpenHydro, Marine Current Turbines y Hammerfest Strøm, utilizan turbinas acuáticas.

McAdam señala que Aquamarine ha solucionado defectos menores en las válvulas y las tuberías desde que instaló la primera demostración del sistema Oyster, un dispositivo de 315 kilovatios, en el EMEC en octubre. Aquamarine está ahora construyendo su dispositivo a escala comercial—una matriz de tres aletas que alimenta una única turbina de 2,5 megavatios—y que tiene planeado poner a prueba en el EMEC el año próximo.

La construcción de ese dispositivo resulta cara, y ese es el mayor reto de todos a los que se enfrenta la industria. Los desarrolladores de las instalaciones en las Orkneys se beneficiarán de tratamiento favorable hacia la energía marina que proporcionan las leyes de energía renovable del Reino Unido. Sin embargo, ese valor sólo puede ser usado cuando los proyectos alcancen su escala completa, y los desarrolladores afirman que son necesarias más instalaciones a pequeña escala.

“Lo que nos falta ahora mismo es esta fase de instalación de equipamiento, e intensiva en cuanto a capital, para probar que es factible,” señala McAdam. Afirma que Alex Salmond, que dirige el gobierno de Escocia, está planeando una conferencia sobre energía verde para más adelante en 2010, y que tendrá en consideración más incentivos para la energía marina.

Un estudio de 2005 realizado por el Instituto de Investigación de Energía Eléctrica (EPRI, en inglés) con sede en Palo Alto, California, sugiere que la energía undomotriz podría generarse a un coste comparable al de la energía eólica costera que proviene de Hawaii, California, Oregon y Massachusetts. El EPRI ha afirmado con anterioridad que la energía undomotriz y la mareomotriz podrían satisfacer alrededor del 10 por ciento de la demanda eléctrica de los EE.UU. Paul Jacobson, líder de energía oceánica de EPRI, señala que estas estimaciones iniciales están siendo actualizadas en estos momentos a través de una detallada evaluación nacional de la energía undomotriz que el EPRI espera tener finalizada el año próximo, y una evaluación mareomotriz nacional está en camino en Georgia Tech.

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