Las grandes debilidades de los contratos inteligentes en cadenas de bloques, como su falta de confidencialidad y sus limitaciones de ejecución, podrían solucionarse con este enfoque de la 'start-up' Oasis Lab, cuya idea ya ha recaudado casi 40 millones de euros en inversiones
El asesino del Golden State ha sido arrestado, según los indicios, gracias a una investigación basada en webs de genealogía que almacenan la información genética de cientos de miles de usuarios. Pero a estos no se les pidió permiso para utilizar su ADN en la investigación policial
Una investigación confirma que la ficción científica tiene cada vez más peso en las investigaciones del mundo real, sobre todo en las que abordan la relación entre los humanos y las máquinas. A nivel global, los investigadores utilizan la ciencia ficción de tres formas
Los algoritmos de aprendizaje automático pueden encontrar patrones para identificar a personas en riesgo de padecer la enfermedad y a los pacientes óptimos para tratamientos experimentales. También podrían predecir su gravedad en cada caso y arrojar luz sobre sus causas
El experto del MIT Sinan Aral cree que el escándalo de Cambridge Analytica es responsabilidad de la propia empresa y del investigador que filtró los datos. Pero teme que las consecuencias limiten a cientos de buenos investigadores que intentan estudiar el impacto de las redes sociales en nuestras vidas
Durante años, EE. UU. ha liderado la investigación en inteligencia artificial, pero una serie de nuevas políticas gubernamentales amenazan con destruir su liderazgo. Los recortes en financiación se unen a una posible reforma fiscal que aumentaría las tasas de los estudiantes universitarios
Los científicos especializados en proyectos biológicos controvertidos temen que sus investigaciones se vean obstaculizadas si el presidente empieza a prestarles atención. Desde que llegó a la presidencia, Trump no ha manifestado su opinión sobre las fronteras de la biología
Las empresas que quieren investigar a kilómetros sobre la superficie de la Tierra dependen de los caros servicios de la NASA para llevar sus instrumentos. Pero dos 'start-ups' trabajan en versiones más baratas que podrían ampliar los límites del conocimiento humano