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Biotecnología

Una proteína podría ser la clave de la eterna juventud que reside en la sangre

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Las células de ratones viejos rejuvenecen cuando se rodean de osteopontina e investigaciones previas sugieren que hay algo en la sangre capaz de luchar contra el no tan implacable paso del tiempo

  • por Michael Reilly | traducido por Teresa Woods
  • 31 Marzo, 2017

Una proteína añadida a células sanguíneas parece rejuvenecerlas, lo que está aumentando la especulación sobre si la sustancia podría ser, al fin, la clave para revertir algunos efectos del envejecimiento.

Según la revista New Scientist, unos investigadores han descubierto que los ratones más viejos tienen niveles bajos de una proteína llamada osteopontina y que las células madre que se les inyectaban envejecían rápidamente. De forma contraria, cuando se colocan células viejas en una placa de Petri repleta de osteopontina, las células parecen rejuvenecer. El equipo responsable afirma estar desarrollando un fármaco que pueda ser administrado para, como lo expresó uno de los investigadores, "devolver la juventud a la sangre vieja" y reforzar los sistemas inmunes de la gente mayor.

Lo que pasa es que la brecha entre una investigación básica y un fármaco clínicamente eficaz es enorme, especialmente en el campo del envejecimiento. Hace varios años, los científicos y el público se emocionaron al saber que cuando un ratón viejo y otro joven se unían quirúrgicamente para compartir el mismo sistema circulatorio, el ratón viejo demostró muchas señales de rejuvenecimiento. El secreto para prolongar la vida, según parecía, residía en la sangre joven.

Pero los experimentos que vinieron después no consiguieron mucho más que resultados contradictorios. En uno, la sangre vieja resultó ser muy perjudicial para los ratones jóvenes, mientras la sangre joven no hizo gran cosa por los viejos. Y, sin embargo, la idea está cuajando como negocio en Silicon Valley (EEUU). La gente paga unos 7.500 euros a una start-up llamada Ambrosia para recibir una bolsa de dos litros de plasma sanguíneo de una persona joven. El fundador de la empresa lo considera un ensayo clínico, pero otros lo consideran más bien un timo.

En realidad, nadie sabe qué tiene la sangre joven para provocar un efecto rejuvenecedor. De hecho ni siquiera está claro que la sangre sea la parte más importante de la ecuación. El año pasado, un equipo de investigadores del Instituto Salk modificó ratones genéticamente para que portasen copias extra de genes conocidos por tener la capacidad de dar vuelta atrás al reloj biológico de células adultas, transformándolas en algo que se parece a las células embionarias. Al controlar la expresión de estos genes, los investigadores lograron que los ratones viviesen un 30% más de lo normal

Eso no implica que los descubridores de la osteopontina no deban continuar con su trabajo. Está claro que hay señales que indican que el envejecimiento no es una fuerza tan inmutable como creíamos. La pregunta es de dónde vienen esas señales.

(Para saber más: New Scientist, New York Times, La 'start-up' que cobra por inyectar sangre joven antiedad sin aval científico, La sangre del abuelo ratón que casi acaba con su nieto)

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