Biotecnología
Una mujer en EE UU se convierte en la tercera persona que recibe un riñón de cerdo modificado genéticamente
Towana Looney se sometió a un tratamiento experimental y, tras una operación que duró siete horas, se ha convertido en la única persona viva con un órgano de cerdo modificado genéticamente
Towana Looney, una mujer de 53 años de Alabama (EE UU), es la tercera persona en el mundo en recibir un trasplante de riñón de un cerdo modificado genéticamente.
En 1999, Looney donó uno de sus riñones a su madre, pero años más tarde sufrió insuficiencia renal debido a una complicación en el embarazo que le causó hipertensión. En diciembre de 2016 inició tratamiento de diálisis y, poco después, en 2017, fue incluida en la lista de espera para un trasplante de riñón.
Sin embargo, encontrar un órgano compatible resultó complicado. Por ello, los médicos de Looney le propusieron como alternativa un riñón de cerdo. Tras ocho años en la lista de espera, recibió la autorización para el trasplante a través del programa de acceso ampliado de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE UU, que permite el uso de tratamientos experimentales en casos de enfermedades graves o potencialmente mortales.
El cerdo utilizado fue preparado por Revivicor, una empresa de United Therapeutics. Su técnica consiste en modificar 10 genes específicos de una célula porcina para cumplir tres objetivos clave: prevenir el crecimiento excesivo del órgano, reducir la inflamación y, lo más importante, evitar que el sistema inmunitario del receptor lo rechace. Una vez alterada, la célula modificada se inserta en un óvulo de cerdo sin núcleo, que luego es implantado en el útero de una cerda. Este proceso culmina con el nacimiento de un lechón genéticamente modificado.
En teoría, una vez que el lechón alcanza su desarrollo completo, sus órganos pueden ser utilizados para trasplantes en humanos, dado que su tamaño es similar al de los órganos humanos. Hace algunos años, David Bennett Sr. se convirtió en la primera persona en recibir un trasplante de corazón de cerdo. Sin embargo, falleció dos meses después de la cirugía: se descubrió que el corazón estaba infectado con un virus porcino.
A principios de 2024, Richard Slayman fue el primer paciente en recibir un trasplante de riñón de cerdo modificado genéticamente. Falleció dos meses después de la operación, aunque el hospital que lo atendió aseguró en un comunicado que no había "ningún indicio" de que su muerte estuviera relacionada con la operación. En abril, Lisa Pisano se convirtió en la segunda persona en recibir un órgano de este tipo y, durante la intervención, también se le implantó una bomba cardíaca. Sin embargo, el riñón falló debido a un riego sanguíneo insuficiente y tuvo que ser extirpado un mes después. Pisano falleció en julio.
Looney recibió su riñón de cerdo en una operación de siete horas realizada el 25 de noviembre en el NYU Langone Health de Nueva York. La intervención estuvo a cargo de Jayme Locke, de la Administración de Recursos y Servicios Sanitarios de Estados Unidos, y Robert Montgomery, del Instituto de Trasplantes Langone de la NYU.
Looney recibió el alta 11 días después de la operación y se trasladó a un apartamento en Nueva York, donde permanecerá durante tres meses más para que los médicos del hospital puedan hacer un seguimiento y evaluarla.
"Es una bendición. Siento que me han dado una segunda oportunidad en la vida. Estoy deseando volver a viajar y pasar más tiempo con mi familia y mis nietos", afirmó Looney en un comunicado
Los médicos de Looney tienen la esperanza de que su riñón dure más que los de los pacientes anteriores porque, a diferencia de ellos, estaba en mejor estado de salud. Aunque la paciente padecía una enfermedad renal crónica y necesitaba diálisis, no se encontraba en una etapa terminal, como explicó Montgomery en una rueda de prensa. El doctor y su equipo tienen previsto comenzar con ensayos clínicos el próximo año.
En EE UU, más de 100.000 personas están a la espera de un trasplante y, cada día, mueren 17 pacientes debido a la falta de órganos. Ante esta gran necesidad, los investigadores confían en que los animales editados genéticamente sean una nueva fuente de órganos para salvar vidas.
Revivicor no es la única empresa involucrada en este campo. Su competidora eGenesis, que emplea un enfoque distinto en la edición genética, ha utilizado CRISPR para modificar genéticamente a cerdos con unas 70 alteraciones en su ADN.
"El trasplante es uno de los pocos métodos capaces de curar una enfermedad compleja de manera inmediata, pero la escasez de órganos impide que todos los pacientes puedan acceder a esa cura", afirmó Jayme Locke en un comunicado. "La posibilidad de tener una solución a la falta de órganos, sobre todo para aquellos que llevan tanto tiempo esperando en las listas, es algo que nos llena de alegría", añade el médico.
En la actualidad, Looney es la única persona que vive con un órgano de cerdo. "Me siento con mucha energía. Tengo un apetito que no había tenido en ocho años", comentó en una rueda de prensa. "Puedo poner la mano sobre el riñón y sentir cómo late", aseguró la mujer que recibió el trasplante.