En 1994, a principios de la era de internet, un prominente tecnólogo aseguró que la red podía ser una forma de que los pobres y los marginados ganaran poder
"Ver la autopista de la información como algo centrado en el vídeo a la carta y las compras desde casa... es demasiado reduccionista. La cuestión más importante debería ser: ¿Cuál es nuestro objetivo como sociedad? ¿Cómo estamos concibiendo este gran proyecto al que nos dedicamos? Tengo la esperanza de que lleguemos a un consenso para que el sistema sea abierto, inclusivo, igualitario y descentralizado, y que esté basado en el sector privado para que las inversiones se puedan combinar con la posibilidad de recompensa.
Una de las cosas que han acabado perdiéndose aquí es la noción de quiénes somos como estadounidenses. Nuestra tradición democrática enfatiza el valor de la participación activa en la formación de nuestra sociedad. Si tenemos una infraestructura de información de gran apertura, descentralizada, igualitaria y que apoye la diversidad, y que permita a mucha gente ganar mucho dinero, entonces creará muchísimas oportunidades de tipos de participación cívica que no existen hoy día. Así que la cuestión es inclinar la balanza a favor de aquellos que no tengan mucho dinero y poder, dándoles algo más que una oportunidad para se oigan sus voces, para que se oigan entre ellos, para que les oigan sus políticos o la gente en sus comunidades que a lo mejor no comparte sus puntos de vista.
Pongamos todo esto bajo una perspectiva histórica. En la primera década de la república, cuando Estados Unidos era una start-up, Alexander Hamilton y Thomas Jefferson tenían visiones enfrentadas sobre qué tipo de gobierno debíamos tener. Hamilton ganó, y acabamos con una sociedad altamente centralizada. Pero ahora existe la oportunidad de cierta revancha, en condiciones muy diferentes, entre los principios de Jefferson y los de Hamilton. Tenemos la capacidad, mediante la construcción de una infraestructura de información de alta capacidad, de hacer las cosas de manera descentralizada y sin requerir grandes instituciones, ya sean públicas o privadas".
Extraído de 'Siete pensadores en busca de la autopista de la información', del número de agosto de 1994 de 'Technology Review'. El texto anterior es del presidente y cofundador de la Electronic Frontier Foundation y fundador de Lotus Development, Mitchell Kapor.