Google permite a los desarrolladores almacenar datos en sus servidores, con el objetivo de facilitar las búsquedas geográficas en la web.
El pasado miércoles Google anunció que abriría sus servidores a los datos geográficos propiedad de terceros. Esto significa que cualquier desarrollador será capaz de, rápidamente, construir un servicio web basado en localización geográfica sin tener que también administrar su propio servidor de datos. El anuncio puede que resulte beneficioso para muchos desarrolladores, pero también es bueno para Google mismamente: los datos de localización se integrarán en el índice de búsqueda de Google, haciendo que se puedan buscar y, finalmente, permitiendo generar ingresos por publicidad.
En la conferencia Where 2.0, celebrada en San Jose, California, el director de producto de más antigüedad de Google, Lior Ron, hizo una presentación de la interfaz de programación de la aplicación (API, en inglés) que han denominado como Google Maps Data. Ron explicó que el producto permite a los desarrolladores “almacenar información geográfica a medida en la infraestructura de Google, haciendo que dichos desarrolladores no tengan que llevar a cabo el mantenimiento de dichos datos en la infraestructura.”
En 2005, Google lanzó la API de los servicios de Google Maps, que permitía crear mapas a medida de forma sencilla para su uso en páginas web, o construir “mezclas” de datos provenientes de otras fuentes como por ejemplo los listados de pisos en alquiler de Craigslist. En la actualidad, la API de Google Maps Data permite a los desarrolladores ahondar más en el proceso de creación de los mapas, utilizando los servidores de Google para almacenar y administrar los datos geográficos que cualquier aplicación o servicio pueda necesitar.
Platial, un atlas por internet que permite a los usuarios etiquetar y compartir lugares de interés, es una compañía que actualmente utiliza la API de Google Maps Data. Hasta ahora, Platial ha estado almacenando la geo-información generada por sus usuarios en sus propios servidores. Con la nueva API, los datos se integrarán en el índice de Google, afirma Jake Olse, director tecnológico de Platial, con lo que se podrán “descubrir inmediatamente a través de una búsqueda en Google Maps.”
Otro proyecto de Maps Data, llamado My Tracks, ha sido creado por los propios ingenieros de Google. My Tracks se ejecuta en los teléfonos móviles Android y registra la localización de “migajas de pan” (información de GPS) que los usuarios dejan al caminar, correr o ir en bici. Los datos se almacenan en los servidores de Google, y la gente puede editarlos y compartir la información a través de Google Maps.
Olsen afirma que puesto que los datos geográficos entran en la base de datos de Google en tiempo real, esto podría hacer que las búsquedas también proporcionasen resultados en tiempo real. En la actualidad, la compañía hace un índice de la web de forma rotatoria a lo largo del día y actualiza una serie de servicios con más frecuencia, como por ejemplo las Noticias. Un flujo en tiempo real de datos geográficos podría ayudar a que Google actualizara cierto tipo de eventos en sus índices de forma más rápida. El motor de búsqueda sería capaz, por ejemplo, de recolectar fotos de usuario etiquetadas en el lugar de un crimen o un accidente e incluirlas en las búsquedas de noticias.
Una preocupación cada vez más creciente, no obstante, es el hecho de que Google tenga acceso a mucha más información geográfica que otros servicios. Esto podría bloquear a otras compañías más pequeñas, y hay desarrolladores que quizá desconfiarían ante la idea de entregar a Google todos sus datos.
Otro problema para los desarrolladores reside en que, en la actualidad, la API tiene una serie de limitaciones de servicio. “Si tienes una página web de gran popularidad, te vas a encontrar con limitaciones,” afirma Olsen, “tanto limitaciones de cuota como limitaciones de contenido.” Olsen cree que Google acabará creando un esquema de licencias comerciales y encontrará la forma de crear unos acuerdos de nivel de servicio que aclaren este tipo de permisos y limitaciones.
Mientras tanto, Platial no ha cedido el contenido completo de sus bases de datos. “Como ocurre con cualquier otro servicio en la nube,” afirma Olsen, “si el servicio deja de funcionar, tú también dejas de funcionar.”