Investigadores demuestran que un smartphone puede medir algunos signos vitales de forma precisa y cómoda.
Una nueva aplicación para teléfonos inteligentes es capaz de tomar el pulso y medir nuestra respiración mediante la detección de cambios sutiles en el color de la piel. Todo lo que hay que hacer es mantener el dedo índice frente a la cámara de vídeo de un teléfono inteligente durante unos pocos minutos.
A principios de este año, investigadores del Media Lab en el MIT (Instituto de Tecnología de Massachusetts, Estados Unidos) demostraron que un ordenador podía medir de forma fiable el ritmo cardíaco utilizando un espejo y una webcam. La nueva aplicación fue creada por investigadores del Instituto Politécnico de Worcester (EE.UU.) con el objetivo de crear aplicaciones para teléfonos inteligentes capaces de registrar la información básica de salud sin necesidad de usar sensores externos, que pueden resultar costosos y difíciles de manejar.
Cuando los investigadores compararon la aplicación con herramientas estándar para la medición de la frecuencia cardiaca y respiratoria, tales como un electrocardiógrafo y un oxímetro de pulso, las lecturas fueron casi idénticas. Los resultados serán publicados en IEEE Transactions on Biomedical Engineering durante el otoño.
Ki Chon, ingeniero biomédico en Worcester, así como investigador principal del estudio, espera que la tecnología ayude a las personas mayores a supervisar sus signos vitales en el hogar o en instalaciones de salud asistida. "La aplicación también parece funcionar en el lóbulo de la oreja, así que el teléfono podría incluso medir la frecuencia cardiaca mientras el usuario habla por teléfono", señala.
Chon y sus colegas también están colaborando con médicos en el UMass Memorial Medical Center, usando la aplicación para controlar a pacientes con fibrilación auricular, un ritmo cardíaco anormal relativamente común que aumenta el riesgo de accidente cerebrovascular. Están comenzando con pacientes que ya han sido diagnosticados con el trastorno, aunque David McManus, el médico principal del proyecto, afirma que la aplicación también puede ayudar a identificarlo, sobre todo en personas que sufren problemas solo periódicamente.
En lugar de esperar a que los síntomas aparezcan una vez más, los pacientes pueden usar la aplicación para mantener un registro diario de su ritmo cardíaco, el cual podrían enviar a su médico o llevar a su próxima cita. "Esta podría ser una herramienta muy poderosa para la supervisión de la arritmia", afirma McManus. "No es necesario usar hardware adicional, y hace uso de un dispositivo que mucha gente ya tiene".
La parte complicada para Chon y su equipo será hacer que la aplicación funcione en diferentes tipos de teléfonos inteligentes. La aplicación se basa en una combinación de luz verde emitida por la cámara de vídeo y luz blanca del flash, y estos componentes pueden variar ligeramente de un teléfono a otro. Su estudio de prueba de concepto fue realizado en un Motorola Droid. Los investigadores planean hacer más pruebas antes de que la aplicación esté disponible para su descarga. También están probando la capacidad de un teléfono inteligente para medir la pérdida de sangre, lo que podría ayudar a los pacientes e incluso al personal de ambulancias en casos de emergencia.