Los usuarios pueden compartir información, pero la red sólo ve datos encriptados.
Un grupo de investigadores de Microsoft ha desarrollado un software de redes sociales móviles que permite a los usuarios compartir información personal con amigos, pero no con la propia red.
"Cuando usted comparte una foto u otra información con un amigo en [un sitio como] Flickr, sus servidores también pueden leer esa información", explica Iqbal Mohomed, investigador de Microsoft Research Silicon Valley, quien desarrolló la nueva red, llamada Contrail, con varios compañeros. "Con Contrail, el núcleo central nunca conocerá mi información ni qué les interesa a unos usuarios en concreto--sólo ve cosas codificadas a transmitir."
Cuando un usuario de Contrail actualiza su información en la red, añadiendo una nueva foto, por ejemplo, el archivo de imagen se envía a un servidor que está operando dentro de la nube de la red, de la misma forma que ocurre con una red social convencional. Sin embargo, ésta es cifrada y se le adjunta una lista que especifica a qué otros usuarios se les permite ver el archivo. Cuando los dispositivos de estos usuarios comprueban el estado de la red social, descargan los datos y los descifran para revelar la foto.
Contrail requiere que los usuarios seleccionen activamente si desean recibir información de sus amigos. Cuando una persona desea recibir una clase particular de actualización de un contacto, se envía un "filtro" al dispositivo del amigo. Si, por ejemplo, una madre quiere ver todas las fotos de su hijo etiquetadas con la palabra "familia", ella tiene que crear el filtro en su teléfono. El filtro es entonces encriptado y enviado a través de la nube al dispositivo de su hijo.
Una vez descifrado, el filtro asegura que cada vez que su hijo comparta una foto etiquetada como "familia", una versión encriptada es enviada a la nube con un encabezado que la dirige al teléfono móvil que pertenece a su madre (así como al de cualquier otra persona que haya instalado uno filtro similar en su dispositivo). El cifrado esconde las preferencias de la madre de la nube, así como las propias fotos. Cada usuario tiene una clave criptográfica en su dispositivo por cada amigo que se utiliza para cifrar y descifrar la información compartida.
Contrail se ejecuta en el servicio nube de ordenadores de Microsoft, Windows Azure, y el equipo ha desarrollado tres aplicaciones compatibles que funcionan en teléfonos móviles HTC con Windows Mobile. "Ésta es una [interfaz de programación de aplicación] sobre la cual se pueden construir todo tipo de aplicaciones sociales," explica Mohomed. "Nosotros sólo hemos desarrollados estas aplicaciones para demostrar lo que puede hacer."
Además de la aplicación de intercambio de imágenes, los investigadores crearon una herramienta para compartir información sobre localización con sus amigos. Los amigos pueden recibir una notificación cuando un usuario entra en una zona dibujada en un mapa (ver el vídeo de presentación de la aplicación). Sin embargo, los usuarios pueden restringir la cantidad de información compartida por su teléfono. "Es mi localización, así que yo soy quien tiene el control", señala Mohomed. "Si mi jefe quisiera realizar el seguimiento de mi ubicación, podría permitirle hacerlo sólo durante los días laborables, por ejemplo."
Mohomed piensa que algunas personas se sentirán atraídas por la idea de una red social más segura, aunque admite que el proveedor podría necesitar encontrar un modelo de negocio diferente--muchas redes, incluyendo Facebook, se basan en el poder para acceder a los datos del usuario con el fin de ofrecer publicidad personalizada.
"A mí podría no importarme que Flickr vea mis fotos y mensajes, pero la gente puede sentirse de otra forma respecto a compartir su ubicación", señala Mohomed. "Imagínese que usted está utilizando una aplicación que permite realizar el seguimiento del teléfono móvil de su hijo--¿qué pasa si su servidor está comprometido?"
David Koll, investigador de la Universidad de Göttingen, Alemania, está de acuerdo en que vale la pena preocuparse por semejantes escenarios. Él señala que ha habido ejemplos recientes de servidores que han sido hackeados. El proveedor de servicios sociales RockYou, por ejemplo, sufrió el robo de los datos de acceso de 32 millones de usuarios el año pasado. "Es bueno pensar en diferentes maneras de gestionar las redes sociales", afirma él. "La gente es cada vez más consciente de su intimidad, y un almacén central que lo sabe todo tiene sus riesgos."
Koll y sus compañeros de Göttingen están trabajando en una nueva arquitectura propia para redes sociales alternativa para dispositivos móviles. Ésta acabaría con el servidor central por completo, y tendría los datos de los usuarios en cachés seguros distribuidos a través de los dispositivos en la red. Tener un servidor central tiene beneficios, sin embargo. Una plataforma basada en la nube es fácil de escalar, afirma Mohomed. "Si de pronto hay más usuarios o más tráfico, tal vez debido a un desastre natural, usted sólo tiene que añadir más instancias a la nube para manejarlo."