La transformación de células de apoyo en el cerebro en neuronas podría algún día ayudar a reparar los daños sufridos tras un accidente cerebrovascular o una lesión.
Las células de apoyo del cerebro, llamadas astroglias, son capaces de convertirse en neuronas funcionales, según un estudio aparecido esta semana en Public Library of Science Biology. Los investigadores descubrieron que podían transformar las células en dos clases distintas de neuronas, y que las neuronas podían formar conexiones entre sí en una placa. Aunque la investigación está en una fase inicial, el descubrimiento sugiere que algún día los científicos podrían usar las células existentes en el cerebro para reparar tanto el cerebro como la médula espinal después de una apoplejía, una lesión o una enfermedad neurodegenerativa.
El equipo de investigación, perteneciente al Centro Helmholtz y a la Universidad Ludwig-Maximilians en Munich, había demostrado previamente que era posible convertir las astroglias—unas células con forma de estrella que sirven como apoyo estructural en el cerebro—en neuronas mediante la introducción en las células, utilizando un virus, de unos genes conocidos como factores de transcripción. En ese estudio, sin embargo, las neuronas no lograron formar conexiones funcionales, algo conocido como sinapsis. En la actualidad los investigadores han demostrado que una serie de células astroglias tomadas de ratones jóvenes pueden ser transformadas en neuronas formadoras de sinapsis, y pueden dirigirse hacia dos clases principales de neuronas distintas.
La adición de unas neuronas específicas excitadoras y generadas por genes, que promueven la actividad en otras células. Mediante la adición de un gen diferente, lograron formar neuronas inhibidoras, que frenaron la actividad celular. En principio, "podríamos generar otros tipos de neuronas si elegimos los elementos apropiados", afirma el coautor del estudio Benedickt Berninger. Por ejemplo, afirmó, los investigadores podrían generar los tipos de neuronas liberadoras de dopamina que son destruidas por la enfermedad de Parkinson.
El estudio se suma a la cada vez mayor evidencia de que ciertos tipos de células se pueden transformar directamente en otros tipos sin antes tener que convertirse en células madre. Con anterioridad, los investigadores han transformado células de la piel en neuronas, y un tipo de célula del páncreas en otra clase de célula. Marius Wernig, coautor del estudio sobre las células de la piel y biólogo de células madre en la Universidad de Stanford, asegura que existe una cada vez mayor conciencia de que tal vez no sea necesario borrar la identidad existente de una célula antes de darle una nueva.
Wernig señala que el documento de PLOS Biology ofrece una nueva estrategia para la creación de neuronas que complementa el método centrado en la utilización de células de la piel. Las células de la piel, afirma, serían más útiles en la generación de células del propio paciente en una placa de Petri para trasplantes, ya que una muestra de piel es fácil de obtener. Por el contrario, este último estudio "significa que estas células astrogliales podrían convertirse en el cerebro", sin la necesidad de llevar a cabo un trasplante. Berninger afirma que uno de los próximos retos es determinar si estas neuronas reprogramadas son capaces de sobrevivir y funcionar en un cerebro vivo.
Afortunadamente, el cerebro parece poseer una fuente de células astroglias. Cuando el cerebro se lesiona, estas células proliferan, de forma similar a lo que ocurre en la piel cuando se repara por sí sola después de una herida. Los investigadores descubrieron que también podrían obtener neuronas a partir de astroglias provocadas por una lesión en cerebros de ratones adultos.