Un análisis de las transacciones realizadas antes de que la plataforma de intercambio de bitcoins se declarara en bancarrota revela muchas actividades sospechosas, como transacciones que compraban criptomonedas a precios muy por debajo o muy por encima de su valor de referencia
En 2013, la mayor plataforma de intercambio de bitcoins del mundo manejaba más del 70 % de todas las transacciones con criptomonedas. Se llamaba Mt. Gox, y parecía que a la empresa responsable le esperaba un futuro brillante. Pero en febrero de 2014, Mt. Gox suspendió los intercambios, cerró su página web y se declaró en bancarrota, afirmando que unos 850.000 bitcoins habían desaparecido y que probablemente habían sido robados (ver Bitcoin en el punto de mira). Desde entonces, la compañía ha estado sumida en los procedimientos judiciales iniciados por los acreedores que esperan recuperar sus fondos.
Nunca llegó a quedar claro qué fue exactamente lo que salió mal en Mt. Gox. Abundan los rumores de que la plataforma estaba infestada de cuentas que intentaban manipular el precio de los bitcoins. Pero nunca se han encontrado pruebas de esta actividad.
Ahora esto podría cambiar gracias al trabajo del investigador de la Universidad Sun Yat-sen (China) Weili Chen y sus colegas, quienes afirman haber descubierto evidencias de una grave manipulación del mercado en el período previo al colapso de esta plataforma de intercambio en 2014. Su descubrimiento, según ellos, sugiere que el mercado de la criptomoneda necesita desesperadamente una supervisión más fuerte para evitar futuras manipulaciones y tranquilizar a los posibles inversores.
Su método se basa en la red de transacciones realizadas en esta plataforma de intercambio entre abril de 2011 y noviembre de 2013. Estos datos se filtraron misteriosamente en 2014 y proporcionan muchos más detalles de los que están disponibles en el registro de blockchain (cadena de bloques). Han sido estudiados por varios grupos, pero Chen y sus colegas son los primeros que han analizado las propiedades de la red de esta manera.
Para empezar, el equipo examinó cada transacción para ver si se realizó utilizando aproximadamente el mismo precio por el cual los bitcoins se estaban intercambiando a nivel global. Para su sorpresa, un número importante de operaciones se realizaron con tasas mucho más altas o más bajas frente al precio de referencia.
El 30 de agosto de 2013, por ejemplo, el precio medio de un bitcoin estaba entre los 113 y los 125 euros. Pero ese mismo día, Chen y sus compañeros encontraron una transacción en los datos de Mt. Gox en los que un único bitcoin fue vendido por unos 43.000 euros y otro por solo 0,71 euros.
De hecho, el equipo contó todas las operaciones en las que el precio fue un 50 % superior o inferior respecto al precio de referencia y encontró casi 200.000 de ellas. Esta cifra representa aproximadamente el 2,8 % del número total de transacciones.
La gran cantidad de transacciones de este tipo sugiere que propósito específico. Chen y sus colegas creen que los objetivos más probables son proporcionar liquidez y aumentar el volumen de operaciones. Pero no hace falta ser científico espacial para determinar cómo este tipo de actividad podría influir también en el precio de un bitcoin. La investigación afirma: "La manipulación de precios también es un propósito probable. Hemos encontrado que las transacciones anormales están muy relacionadas con el precio de un bitcoin".
Los investigadores han ido más allá y han estudiado la red que se forma cuando cada usuario representa un nodo y cada transacción entre ellos crea un vínculo. Luego observaron el patrón de las operaciones entre los 10.000 usuarios que habían estado involucrados en las transacciones anormalmente altas, los 6.000 usuarios implicados en transacciones de bajo precio y un grupo de 9.000 usuarios que nunca estuvieron envueltos en una transacción anormal.
El análisis de la red revela algunas tendencias asombrosas. Para empezar, la red de cuentas anormales está mucho más agrupada que la red de las cuentas normales. "Una posible razón es que estas cuentas estén controladas por una organización", destaca la investigación. El equipo también examinó las transacciones y cuentas que tuvieron la mayor influencia en el precio. Las cuentas anormales están mucho más relacionadas que las cuentas normales.
Estas cuentas también muestran algunos patrones de intercambio altamente sospechosos. Por ejemplo, el 7 de febrero de 2013, la cuenta 231 realizó 749 transacciones consigo misma. Esto no tiene sentido para un comerciante ordinario, pero Chen y sus colegas tienen su propia teoría: "Una explicación razonable para el patrón de auto-bucle es que la cuenta puede pertenecer a la plataforma de intercambio y puede usarse para aumentar el volumen diario de transacciones o la manipulación de precios".
Otro patrón sospechoso es un gran número de transacciones de una cuenta a otra o entre dos cuentas. Por ejemplo, el 14 de abril de 2013, la cuenta 231 compraba y vendía con otra cuenta única más de 150 veces.
Todo esto resulta muy sospechoso. Los autores afirman: "Estos hallazgos nos han convencido de que había muchos comportamientos de manipulación del mercado en esta plataforma de intercambio". Este análisis plantea cuestiones importantes para los comerciantes e inversores de bitcoins. En particular, querrán saber si este tipo de manipulación aún está en curso y cómo se puede prevenir.
Una regulación más fuerte podría ayudar, pero de momento nadie la ha desarrollado. Las criptomonedas no están oficialmente reconocidas como dinero por la mayoría de los gobiernos. Si alguna vez llegan a estarlo, se aplicará una nueva serie de regulaciones financieras que harán que este tipo de manipulación sea mucho más difícil. Pero hasta entonces, es probable que este tipo de comercio siga siendo como el Salvaje Oeste.
Ref: arxiv.org/abs/1902.01941: Market Manipulation of Bitcoin: Evidence from Mining the Mt. Gox Transaction Network