Un interruptor cuántico podría añadir la detección de la presión en las pantallas móviles.
Olvídate de pasar los dedos por la pantalla o pellizcarla—la nueva generación de dispositivos portátiles con pantallas táctiles serán capaces de distinguir entre un toque suave y un golpe con fuerza.
Peratech, una compañía del Reino Unido, ha firmado un contrato de 1,4 millones de dólares para ofrecer la licencia de su tecnología detectora de presión para pantallas táctiles al fabricante de pantallas japonés Nissha, encargado de producir pantallas para compañías entre las que se incluyen LG y Nintendo. La tecnología de Peratech es una más entre las muchas que se pueden incluir en los dispositivos portátiles. Sin embargo utiliza un novedoso mecanismo cuántico para detectar la presión, y promete ser más sensible y más eficiente que el resto de tecnologías.
Peratech, que surgió de un laboratorio de investigación en la Universidad de Durham en 1996, utiliza un material eléctricamente conductivo conocido como compuesto de tunelado cuántico (QTC, en sus siglas en inglés). El tunelado cuántico se da cuando los electrones saltan entre dos conductores unidos pero separados mediante una barrera aislante. En los interruptores de Peratech, un polímero actúa como capa de aislamiento. Está colocado junto a unas partículas metálicas conductivas y puntiagudas, cada una de unos 10 nanómetros de tamaño.
“Estos son unos materiales poliméricos que cambian su resistencia cuando se aplica una fuerza,” afirma Philip Taysom, director general de Peratech. Por tanto, al aplicar una fuerza, las partículas tienden a unirse. “Al acercarse, forman el tunelado cuántico,” señala.
Este método permite a los sensores QTC de Peratech ser extremadamente delgados: sólo 75 micrómetros de grosor. Los sensores se alinean en el perímetro de la pantalla. Cuando se aplica una presión y la pantalla se dobla ligeramente (incluso dos micrómetros), los interruptores detectan este cambio. Al comparar las lecturas del sensor con datos sensoriales de la pantalla táctil, es posible averiguar con precisión dónde y con qué fuerza está siendo presionada la pantalla.
Patrick Olivier, experto en interacción hombre-computadora y gráficos por ordenador en la Universidad de Newcastle en el Reino Unido, afirma que la detección de presión se ha visto enormemente limitada hasta ahora a las pantallas de gran tamaño con cámaras montadas por detrás. Un ejemplo de esto es el sistema de mesa de Microsoft, llamado Surface. Este método funciona mediante el uso de una técnica llamada reflejo interno total frustrado, mediante el que la cámara detecta la luz desde dentro de la misma pantalla al tiempo que es refractada por el dedo que hace contacto con dicha pantalla.
Jeff Han, fundador de Perceptive Pixel, con sede en Nueva York, una compañía pionera en el desarrollo de intefaces de gran tamaño, multitouch y sensibles a la presión, afirma que el método de Peratech es uno de entre los muchos que podrían aportar la detección de presión a los dispositivos móviles. “Se han dado muchos intentos por aumentar las pantallas táctiles con evaluadores de tensión o detectores de resistencia sensibles a la fuerza colocados en los puntos de montaje de la pantalla,” afirma.
Sin embargo, Peratech señala que el uso del tunelado cuántico significa que su material es más sensible a la presión que los materiales usados por la competencia, como por ejemplo los compuestos de carbono. También significa que los sensores no usan energía a no ser que alguien aplique una presión. La compañía afirma que los sensores se pueden colocar en las pantallas existentes en la actualidad con relativa facilidad, y que se pueden manufacturar utilizando los métodos de impresión estándar.
Los distintos gadgets que utilicen este tipo de tecnología deberían llegar al mercado incluso en abril de este año, afirma Taysom. Estos dispositivos podrían aportar nuevas funcionalidades interactivas. “Cuando más presión hagas, más rápido es el scroll en la pantalla o más rápidamente corre un personaje en un juego,” señala Taysom. Esto podría facilitar el arrastre y suelta de objetos en la pantalla, o la realización de dos tareas al mismo tiempo, como por ejemplo arrastrar una imagen y hacer un zoom sobre ella, afirma Taysom.