Tecnología y Sociedad
La lenta muerte de Bitcoin a manos de sus rivales (aunque todas son iguales)
Aunque Bitcoin es la criptomoneda más popular, existen más de 600 diferentes en activo y todas parecen estar aumentando su cuota de mercado a falta de un consenso para definir un estándar internacional, según una nueva investigación
Cada vez hay un mayor consenso de que las criptomonedas van a desempeñar un importante papel en el futuro del dinero. Una de ellas ha penetrado de forma más profunda en el imaginario colectivo como el activo digital por excelencia: Bitcoin.
Pero este mercado va mucho más allá de la popular moneda. Y aunque se han realizado bastantes estudios que examinan el papel y el futuro de Bitcoin, pocos han explorado el resto de las criptomonedas y su evolución.
Hoy eso cambia gracias al trabajo del investigador de la Universidad de la Ciudad de Londres (Reino Unido) Abeer ElBahrawy, que junto a unos compañeros, ha examinado el mercado de las criptomonedas al completo. Y según sus conclusiones, es mucho más complejo y maduro de lo que se creía. La evolución de este mercado incluso guarda un fuerte parecido con la evolución de otros tipos de ecosistemas, lo que da algunas pistas de cómo podría evolucionar en el futuro.
Primero, un poco de contexto. El gran reto de las monedas digitales consiste en impedir las copias fraudulentas. Para ello, actualmente disponen de dos mecanismos. El primero consiste en publicar cada transacción en un gran libro público y almacenar muchas copias para poder compararlas y actualizarlas automáticamente. Esto impide que una misma moneda pueda gastarse en dos compras distintas.
El segundo mecanismo consiste en proteger el libro criptográficamente. Cada actualización recopila un abanico de nuevas transacciones y las añade al libro existente. Pero para hacerlo, la versión anterior del libro mayor se "congela" y después se encripta.
La nueva versión actualizada, llamada bloque, incluye la copia encriptada de la versión anterior. Y todos estos datos encriptados permiten generar un número que sirve para comprobar la veracidad del bloque. Y es muy difícil crear una falsificación de este número para burlar el sistema. El hecho de que los bloques sean fáciles de comprobar pero tan difíciles de copiar es lo que garantiza la seguridad del sistema.
Por supuesto, a medida que el libro va cambiando es necesario generar nuevos bloques basados en los anteriores que van formando una cadena ininterrumpida de bloques. De allí, el nombre de la tecnología: cadena de bloques, o blockchain en inglés.
Bitcoin es, con creces, la más famosa de estas criptomonedas, y también es de las más antiguas, puesto que apareció en 2009. Pero para nada es la única. Así que una pregunta interesante es cómo está evolucionando el mercado global de las criptomonedas.
Para averiguarlo, el equipo de ElBarhrawy analizó el comportamiento de 1.500 criptomonedas aparecidas desde 2013, de las que 600 de ellas siguen cotizando activamente. Los investigadores señalan que este mercado ha entrado en un período de crecimiento exponencial y actualmente vale unos 48.500 millones de euros. En contraste, el valor total de todo el dinero a nivel mundial ronda los 54.000 billones (con b) de euros.
Pero aunque el mercado de las criptomonedas está creciendo deprisa, el equipo de ElBahrawy demuestra que algunos aspectos del mercado son estables. Por ejemplo, el número de criptomonedas activas se ha mantenido más o menos igual desde 2013, y también su distribución de cuota de mercado, que sigue una ley de potencia bien conocida. El equipo también demuestra que esta distribución se puede reproducir con un modelo estándar de evolución con cifras que representan el ritmo al que emergen y desaparecen las monedas.
La distribución mediante la ley de potencia aparece en un amplio abanico de sistemas. Por ejemplo, también describe el tamaño de las religiones, los idiomas y hasta de las guerras (medido por el número de muertes). Ninguno de estos sistemas tiene ninguna preferencia de religión ni idioma ni guerra. Pero en igualdad de condiciones, todos forman este tipo de distribución.
El hecho de que la distribución de tamaños de las criptomonedas siga la misma ley de potencia es importante. Implica que, a nivel de mercado, todas las monedas son iguales. "Los datos demuestran que no existe ningún consenso detectable a nivel de población sobre cuál es la 'mejor' moneda ni de que algunas sean mejores para determinados usos que otras", escriben los investigadores.
Está por ver si eso es cierto o no. Varios críticos señalan numerosas limitaciones técnicas asociadas a Bitcoin, y esto ha inspirado una nueva generación de criptomonedas, como Ethereum, pero aún no se sabe qué influencia tendrá en el mercado.
Ninguna criptomoneda se impondrá
Pero a medida que las distintas criptomonedas mantienen su crecimiento exponencial, la cuota de mercado de Bitcoin se va reduciendo. Las cinco monedas más grandes, Ethereum, Ripple, Litecoin, Dash y Monero, ya acaparan alrededor del 20% del mercado. Y la tendencia de Bitcoin está clara. Según la investigación, su cuota de mercado para 2025 estaría "alrededor del 50%".
Pero las criptomonedas no sólo se usan como forma de pago. Bitcoin también es ampliamente utilizada para usos no monetarios como para fijar marcas temporales.
Muchas de estas aplicaciones se beneficiarían si la sociedad llegara a un consenso para utilizar una única criptomoneda. "Mientras que el uso de criptomonedas como activos especulativos debería impulsar su diversificación, su adopción como método de pago (es decir, el uso convencional de un medio de pago común) debería incentivar un régimen de todo-para-el-ganador", sugiere el equipo de Bickell.
Pero la experiencia con otros ecosistemas sugiere que no hay garantías de que esto vaya a pasar. Por ejemplo, ningún sistema operativo de ordenador ha sido capaz de diezmar al resto, sin importar la implacabilidad de su despliegue. Ni tampoco ha logrado imponerse ningún idioma ni religión humana sobre todos los demás.
Esto no quiere decir que no pueda pasar. Pero a no ser que se produzca una importante manipulación externa del mercado, lo más probable es que exista una importante diversidad dentro del mercado de las criptomonedas durante el futuro previsible.
Ref: arxiv.org/abs/1705.05334: Bitcoin Is Not Alone: Quantifying and Modelling the Long-Term Dynamics of the Cryptocurrency Market