El Palau de les Arts de Valencia adapta este antiguo arte a los lenguajes modernos a través de la innovación tecnológica
El mitológico conflicto griego de la guerra de Troya ha sido recogido en libros, películas y hasta en una ópera, Les Troyens, escrita por el francés Héctor Berlioz alrededor de 1857. Cuando el Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia (España) decidió subir la pieza a su escenario, los troyanos de los que hablaba Virgilio se transformaron en virus informáticos y el campo de batalla de la antigua Grecia fue sustituido por un espacio futurista inspirado en un laboratorio del CERN (Suiza). De fondo, se proyectaban gráficos de ordenador, flashes con alertas de virus y fragmentos de código informático. En el centro de la escena, los personajes se batían en torno a una gigantesca estructura arquitectónica similar al acelerador de partículas del laboratorio.
Pie de foto: instante de la producción de ‘Les Troyens’ con escenografía inspirada en un laboratorio del CERN. Crédito: Palau de les Arts Reina Sofia.
Con esta sorprendente puesta en escena, el Palau de les Arts asumía el reto de adaptar una historia clásica al siglo XXI a través de la tecnología como eje central. “Cada vez más los directores de escena incorporan las nuevas tecnologías para acercar el género al presente”, explican desde el departamento de Comunicación del teatro de ópera valenciano.
Desde la inauguración del Palau de les Arts en 2006, el centro ha buscado la forma de poner en escena producciones modernas, guiadas por la tecnología para enriquecer los relatos. Según el departamento de Comunicación, “en ocasiones, las piezas de ópera son difíciles de entender, sobre todo las que están en otros idiomas”.
Por ello, el uso de recursos técnicos como proyecciones es cada vez más utilizado en las producciones teatrales como elementos narrativos y escenográficos. Estos elementos audiovisuales ayudan a los espectadores a “seguir la obra” y añade un factor de impacto estético más acorde con “el lenguaje moderno y digital”, según afirman las fuentes del departamento.
El Palau cuenta con un equipo técnico de última generación que incluye una serie de sistemas centralizados para proyectar las imágenes sobre la escena. En el dispositivo audiovisual del que dispone el teatro valenciano llegan a utilizarse hasta seis proyectores que operan simultáneamente. Todo ello hace posible adaptar el tamaño y geometría de las imágenes a una determinada pieza del decorado, una superficie irregular del fondo o lo que sea requerido por el escenógrafo.
Uno de los últimos ejemplos del uso de estas técnicas pudo verse en la puesta en escena de El anillo del Nibelungo, de Richard Wagner, el montaje de ópera más premiado en la historia del teatro, que ya ha podido verse en salas internacionales. El próximo estreno de un montaje con proyecciones de vídeo será el de la obra Norma, de Vicenzo Bellini, que podrá verse a partir de marzo de 2015.
Pie de foto: Video proyecciones durante la interpretación de ‘El anillo del Nibelungo’, de Wagner. Crédito: Palau de les Arts Reina Sofia.
Tecnología para leer ópera
Otro de los problemas del formato tradicional de la ópera son los subtítulos. Las obras de ópera narran historias épicas, batallas, historias de amor y luchas de poder, que sin las letras, quedan empobrecidas. No obstante, no es fácil leer los subtítulos, observar a los intérpretes y admirar la escenografía al mismo tiempo sin perderse algo del contenido. Además, el público del teatro no es de habla exclusivamente castellana, lo que añade la necesidad de subtitular en varios idiomas de forma simultánea.
Para resolver esta problemática, todas las butacas del Palau de les Arts están equipadas con una pantalla VFD (variador de frecuencia) en su respaldo. A través de estos dispositivos, los espectadores pueden elegir individualmente entre hasta ocho opciones de idioma. Para evitar problemas durante la representación hay dos equipos que emiten los textos. El departamento de Comunicación explica que si uno fallara, “el otro automáticamente empezaría a emitir”. Este equipo de subtitulado es “único” entre los teatros de España, según afirman los responsables.
Con la inclusión de estas mejoras este centro cultural ha logrado mantener intacta la esencia de un género tan tradicional como la ópera, sin prescindir de las ventajas que aporta la tecnología. Además de enriquecer los relatos musicales, estos avances tecnológicos mejoran la experiencia del espectador y permiten mezclar, a través de la música, escenarios tan dispares como un acelerador de partículas y el campo de batalla de la ciudad de Troya.
Con la colaboración del Palau de les Arts Reina Sofia