TiVo intenta poner en marcha su regreso -mandando mediante 'streaming' todas tus suscripciones- y los proveedores de contenido tienen la sartén por el mango.
TiVo fue uno de las primeras empresas en cambiar el panorama de la televisión convencional. En 1999 lanzó una caja negra que almacenaba los programas en un disco duro -el grabador vídeo digital o DVR- haciendo que a la gente le resultara realmente fácil (en comparación con los vídeos VHS) grabar programas y saltarse los anuncios al verlos. Pero según mejoraron otras cajas parecidas y aparecieron los servicios de streaming en la nube, los clientes de TiVo pasaron de los 4,4 millones en 2007 a menos de la mitad en la actualidad.
Ahora TiVo dice que ha vuelto para cambiar el negocio consiguiendo hacer streaming del vídeo que hay en tu TiVo o DVR en casa a casi cualquier dispositivo, en casi cualquier lugar al que viajes. Dependiendo del servicio que tengas contratado, el nuevo DVR de TiVo, llamado "Roamio", hace streaming de contenido de 13 proveedores de cable además de Netflix, Hulu, Amazon Prime, Pandora, Spotify y YouTube. (Anteriormente TiVo había ofrecido una forma de enviar ese contenido dentro de tu casa a tu iPad u otro dispositivo). Tom Rogers, presidente y director ejecutivo de TiVo, ha declarado que Roamio es "como cualquier otro dispositivo disponible -Roku, Apple TV, Slingbox, Google TV, la televisión por cable estándar- , pero todo en uno". (Un asterisco en su descripción del servicio lee: "Debido a restricciones de los proveedores de contenido, no todo el contenido se puede enviar por streaming fuera del hogar y algunos contenidos solo pueden enviarse mientras haya un dispositivo móvil en la misma red local que el DVR del suscriptor").
Pero mientras el TiVo original te liberaba de algo -la esclavitud de los anuncios televisivos- el nuevo TiVo no te libera de gran cosa. Desde luego no del coste del servicio de cable. Existen algunos servicios auténticamente innovadores como Aereo que capturan las emisiones aéreas mediante antenas diminutas en sus centros de datos y te lo envían mediante streaming por Internet a tu hogar por apenas 8 dólares al mes (unos euros). El nuevo servicio de TiVo seguramente será útil y un buen valor para algunos. Pero dada la gama cada vez mayor de opciones de suscripción disponibles para el streaming de contenido, también es una forma de que las compañías de cable ya establecidas y los proveedores de contenido mantengan su status quo en un mercado televisivo en constante cambio.