Sus ecografías de mayor resolución acelerarán el diagnóstico del cáncer y otras dolencias
Cuando la ingeniera biomédica Muyinatu Lediju Bell cursaba sus estudios universitarios en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, EEUU), su madre falleció de cáncer de mama. Bell creía que su madre podría haber sobrevivido más tiempo si hubiese recibido un diagnóstico antes, por lo que decidió investigar qué hace que algunas ecografías salgan borrosas, un problema que limita la capacidad de los médicos de realizar cribados y diagnosticar el cáncer y otras enfermedades.
Como candidata a un doctorado por la Universidad Duke (EEUU), Bell desarrolló y patentó una novedosa técnica de procesamiento de señales que genera ecografías más claras en tiempo real. La solución podría ayudar especialmente a diagnosticar problemas en personas obesas, porque los tejidos grasos pueden dispersar y distorsionar las ondas de ultrasonidos, lo que ralentizaría la detección de una grave enfermedad. Lediju afirma: "Me parece injusto que una tecnología tan antigua no sirva a un enorme grupo de personas que debería poder beneficiarse de ella".
Más allá de los ultrasonidos, Bell ahora intenta mejorar otro tipo de técnica no invasiva de imágenes médicas, las imágenes fotoacústicas, que emplean una combinación de luz y sonido para generar imágenes de los tejidos corporales. Le interesa especialmente emplearla para la visualización en tiempo real de los vasos sanguíneos durante las neurocirugías. Su correcta aplicación podría reducir el riesgo de dañar accidentalmente la arteria carótida, que suministra sangre al cerebro. Su laboratorio de la Universidad de Johns Hopkins (EEUU) tiene planes de lanzar un estudio de la tecnología en pacientes en 2017.
—Emily Mullin