Cuando quieres ver vídeo en tu móvil o tu tableta, te das cuenta de que muchas redes no son capaces de servir los datos lo suficientemente rápido. Así que lo único que te queda es encontrar un punto Wi-Fi, probar suerte con la red móvil que suele estar atascada y es cara, o enchufar un pincho especial que recoge la señal de televisión.

A principios del año que viene, una nueva tecnología conocida como Transmisión LTE podría cambiar este panorama, posibilitando que las operadoras añadan una transmisión en streaming parecida a la de la televisión entre las señales móviles LTE.

Poner los datos en modo transmisión reduce los atascos, pero tiene sentido sobre todo en situaciones en las que todo el mundo está viendo las mismas noticias, el mismo evento deportivo u otro contenido especial, al mismo tiempo. En esas situaciones, usando el modo de transmisión LTE, el transmisor del operador solo tiene que enviar una señal por un único canal en vez de señales separadas para cada aparato móvil. Así funciona la emisión de televisión tradicional: no importa si están viéndolo 100 personas o un millón, porque el contenido está disponible para quien lo quiera.

El software en la estación base del operador puede modificar la señal LTE para que incluya uno o más canales que funcionan en modo de transmisión, lo que permite que múltiples usuarios reciban el mismo contenido a la vez.

Los operadores aún no han anunciado exactamente qué servicios ofrecerán, pero sí han dado pistas sobre los posibles modelos de negocio: el director ejecutivo de Verizon, Lowell McAdam, ha hecho público su interés por usar la tecnología de transmisión LTE para la Super Bowl de 2014 y otros eventos en directo en formato a la carta para los clientes móviles. En estas circunstancias, un usuario pagaría una tarifa para poder acceder al evento; desde el punto de vista de Verizon solo tendrían que emitir una señal, convirtiéndose en una enorme fuente de ingresos sin cargar la red.

Cualquier jugada de este tipo por parte de Verizon sería la avanzada de los operadores móviles, que se están metiendo cada vez más en el campo de la televisión y rompiendo con el modelo de televisión por cable. Y mientras los operadores móviles ponen en marcha esta plataforma, algunas de las primeras aplicaciones evidentes podrían ser nuevas formas de aumentar la capacidad de la red durante los picos de demanda -como cuando hay grandes eventos deportivos o se producen noticias de interés general- al transmitir estos por la frecuencia de transmisión LTE.

"Tiene sentido porque hay determinadas aplicaciones que atascan las redes inalámbricas, especialmente el streaming de vídeo. Si la gente está viendo vídeo en directo o deportes en línea, tendrá más sentido usar el sistema de transmisión", explica Dipankar Raychaudhuri, director del laboratorio de investigación inalámbrica de la Universidad de Rutgers (EE.UU.)

Qualcomm, el fabricante de chips, afirma que comercializará un paquete de chip y software para transmisión LTE a principios de 2014. "Les proporciona la flexibilidad de personalizar su oferta, incluyendo servicios de transmisión, con mejor calidad para el usuario, sin atascar la red de datos", afirma Mazen Chmaytelli, director senior de desarrollo de negocio en Qualcomm Labs. Ericsson y otros vendedores también están ofreciendo actualizaciones de software para las estaciones base para los operadores móviles que quieren entrar en el negocio.

El tráfico de vídeo en los dispositivos móviles ya está dominando el uso de la red; Cisco predice que se llevará el 90 por ciento del tráfico móvil este año. Y los dispositivos son cada vez más grandes, más rápidos y con mayor resolución, lo que hace aumentar la demanda. "No creo que las retransmisiones televisivas hayan sobrevivido en su estado actual para dentro de 15 años", afirma Raychaudhuri. "Acabarán siendo reemplazadas por contenido inalámbrico y en Internet. Y las cadenas quieren usar una nueva tecnología para ofrecer contenido a demanda y también contenido retransmitido".

La tecnología obliga a los operadores a usar el último estándar inalámbrico, conocido como LTE, que aún no está en funcionamiento en todo el mundo. Pero AT&T, por ejemplo, espera que el estándar LTE aumente mucho el ancho de banda mediante trucos como enviar múltiples señales a múltiples antenas en los teléfonos del futuro (ver "Datos ultrarrápidos en tu 'smartphone' gracias a la tecnología LTE-Advanced").