Espacio
Todo listo para el lanzamiento de la misión que estudiará la habitabilidad de la luna Europa
Tras un grave contratiempo la nave ya está lista para despegar y ayudar a evaluar en qué medida la luna podría albergar vida
La NASA lanzará el próximo 10 de octubre la sonda Europa Clipper, una misión de 5.200 millones de dólares (4.715 millones de euros) a la cuarta luna más grande de Júpiter. La nave despegará del Centro Espacial Kennedy de Florida a bordo de un cohete SpaceX Falcon Heavy. Tras llegar a Júpiter en 2030 y realizar una serie de sobrevuelos, la sonda estudiará Europa como posible hogar para la vida extraterrestre.
Europa no es rocosa y llena de cráteres como nuestra Luna. Su superficie está cubierta de hielo, y las observaciones realizadas con telescopios y naves espaciales sugieren que alberga un colosal océano líquido en su interior que contiene el doble de agua que todos los océanos de la Tierra juntos. Europa también posee algunos de los componentes básicos de la vida: carbono, oxígeno, hidrógeno, nitrógeno, fósforo y azufre. Estas condiciones podrían ser suficientes para que la vida se desarrollara allí, ya sea en las profundidades del océano o en lagos subterráneos.
Sin embargo, Europa Clipper no busca vida extraterrestre. En su lugar, su equipo espera evaluar la habitabilidad de la luna; es decir, en qué medida podría albergar vida. La sonda utilizará una serie de instrumentos científicos, como cámaras, espectrómetros, magnetómetros y radares, para recoger datos químicos, físicos y geológicos en una serie de sobrevuelos. Unos resultados prometedores podrían justificar una misión para aterrizar en Europa y buscar vida.
A principios de año, todo parecía en orden para el lanzamiento, pero en mayo, los miembros del equipo de la misión se enteraron de un posible problema con la electrónica de Europa Clipper. Los datos de las pruebas habían indicado que los transistores de la nave, dispositivos que regulan el flujo de electricidad en la sonda, no sobrevivirían a la intensa radiación formada por partículas cargadas atrapadas en el campo magnético de Júpiter, que es 20.000 veces más fuerte que el de la Tierra.
"El equipo de la misión fue advertido de que piezas similares estaban fallando a dosis de radiación más bajas de lo esperado", dijo la NASA en un comunicado. El desmontaje de la nave y la sustitución de los transistores defectuosos podrían haber retrasado el lanzamiento de la misión mucho más allá de octubre.
Tras meses de pruebas de seguimiento en el Laboratorio de Propulsión a Chorro, el Centro de Vuelos Espaciales Goddard y el Laboratorio de Física Aplicada de la NASA, los investigadores llegaron a la conclusión de que los posibles daños en los transistores no afectarían a las operaciones de la misión. Se probó que los transistores podían repararse al calentarse y que las pausas de 20 días entre grandes exposiciones a la radiación ofrecerían suficiente tiempo de recuperación. Según informa el New York Times, la nave también llevará una caja con varios transistores de la sonda para que el equipo pueda vigilar los daños, un poco como los canarios en una mina de carbón. El 9 de septiembre, Europa Clipper superó una revisión denominada "Punto de Decisión Clave E", por la que se aprobó su lanzamiento.
Una vez en órbita alrededor de Júpiter, Europa Clipper realizará 49 sobrevuelos cercanos de Europa. En su punto más cercano, la nave se acercará a 16 millas (26 kilómetros) de la superficie para realizar observaciones detalladas.
Para más información sobre Europa Clipper, puedes leer el artículo de MIT Technology Review sobre la misión.