Aunque el Gobierno emitió una orden para ilegalizar e impedir la descarga de ambas aplicaciones de propiedad China, ambas siguen disponibles. El 20 % de TikTok será adquirido por Oracle y Walmart con la bendición de Trump, y la prohibición de WeChat ha sido paralizada por un juez de San Francisco
¿Qué está pasando? A finales de la semana pasada el Departamento de Comercio de EE. UU. emitió una orden que prohibía descargar las apps de propiedad china TikTok y WeChat a los estadounidenses. Pero, en solo unos días, las cosas han cambiado mucho.
Primero, TikTok: en agosto, el presidente de EE. UU., Donald Trump, dijo que TikTok debía ser adquirida por una entidad estadounidense antes del 15 de septiembre o prohibiría su uso. El pasado viernes, la empresa, que no opera en China pero es propiedad de la compañía china ByteDance, recibió como fecha límite el 12 de noviembre para llegar a un acuerdo satisfactorio para mantener activas sus operaciones en Estados Unidos. Pero ByteDance no ha cumplido con los requisitos de Trump, en lugar de eso, el sábado Oracle y Walmart anunciaron que comprarían una participación del 20 % en TikTok, por lo que ByteDance seguirá siendo el propietario mayoritario.
Aun así, Trump aseguró que ese acuerdo contaba con su "bendición". ByteDance explicó que Oracle tendría el "derecho de realizar inspecciones de seguridad en el código fuente de TikTok en Estados Unidos" para mitigar los supuestos problemas de seguridad. Trump afirma que el acuerdo conducirá a una inversión de 5.000 millones de dólares (4.262 millones de euros) en educación en EE. UU., pero ByteDance ha dicho que "desconoce" ese punto. Oracle destaca que el acuerdo generará 25.000 nuevos puestos de trabajo, pero esto parece muy poco probable.
¿Y qué pasa con WeChat? WeChat, la aplicación multifunción que se usa para todo en China, desde mensajería hasta pagos, iba a ser retirada de las tiendas de aplicaciones de Google y Apple este domingo. Sin embargo, un juez de San Francisco (EE. UU.) ha paralizado temporalmente la prohibición al considerar que plantea serias dudas sobre la garantía de libertad de expresión de la Constitución de EE. UU. Es probable que el Gobierno de Estados Unidos apele para revocar la decisión del juez.
¿Por qué está pasando todo esto otra vez? Aparentemente, ambas prohibiciones tienen que ver con la seguridad nacional y con las preocupaciones de que el Partido Comunista de China esté utilizando estas aplicaciones para robar datos de los ciudadanos estadounidenses. Sin embargo, la Administración Trump se ha negado repetidamente a proporcionar pruebas de sus afirmaciones.