La tecnología de navegación por satélite se está centrando en la reducción del consumo de combustible.
Durante los últimos años hemos visto cómo algunos sistemas de navegación por satélite han pasado de asesorar a los motoristas sobre las rutas más rápidas a recomendar los trayectos más económicos en cuanto a combustible. Bosch, en Alemania, ha desarrollado un sistema de planificación de rutas que podría ayudar aún más al ahorro de combustible durante un viaje, teniendo en cuenta el peso del coche, la aerodinámica, el tamaño del motor, la transmisión, e incluso el nivel de agresividad del conductor. Bosch afirma que su nuevo software de navegación vía satélite ECO2 es capaz de reducir el consumo de combustible en un 9 por ciento de media, y aumentar el tiempo de viaje promedio sólo en un 9 por ciento.
Las rutas de bajo consumo trazadas por los sistemas de navegación vía satélite existentes, incluyendo algunos dispositivos TomTom y Garmin, se calculan de acuerdo a los límites de velocidad en determinadas carreteras, así como en función del número y tipo de intersecciones a lo largo de un trayecto. Sin embargo la ruta podría no ser la misma para todos los vehículos y conductores, según señala Stefan Meyer desde Robert Bosch Car Multimedia, una división de Bosch con sede en Hildesheim, Alemania. Por ejemplo, algunos vehículos son más eficientes al acelerar que otros. Del mismo modo, una ruta que podría ser eficiente en cuanto a combustible para un conductor más prudente podría serlo menos para alguien que prefiera conducir más rápido—en función de la velocidad más eficiente en relación al consumo de combustible que posea el vehículo.
Gracias al software de ECO2, un conductor es capaz de seleccionar el estilo de conducción: rápido, normal, o económico. Un algoritmo incluye este dato a la hora de calcular la ruta más económica para el estilo de conducción elegido.
ECO2 está diseñado para conectarse al ordenador central del coche y así tener acceso a ciertos detalles específicos, tales como el tamaño del motor, el tipo de combustible y transmisión, y el aire y la resistencia a la rodadura (la cantidad de arrastre que producen los neumáticos y el modo en que se comporta el coche durante las curvas). A partir de todo esto, ECO2 determina "las curvas de consumo de combustible dependientes de la velocidad"—la cantidad de combustible que el vehículo consumirá durante condiciones de conducción y de carretera distintas. "Así que cuando vamos del punto A al B, el algoritmo calcula todas las pequeñas distancias dentro de una ruta con la menor cantidad de consumo total de combustible", asegura Meyer.
Esto no garantiza que el conductor no se vea más tarde atrapado en el tráfico, afirma Meyer. ECO2 está diseñado para ser utilizado con los sistemas integrados de navegación vía satélite, aunque también podría utilizarse en un dispositivo independiente que se conecte a equipos de navegación vía satélite independientes.
Otros fabricantes de navegación vía satélite ya están centrándose más en el tema de la economía de combustible. Econav, que no tiene conexión con los productos de Bosch, fue lanzada el año pasado por la empresa española Vexia, con sede en Madrid. A los usuarios se les pide especificar su tipo de vehículo y el número de pasajeros, para así medir mejor aquellos momentos en que el conductor debería cambiar de marchas o reducir la aceleración.
David Elder, director nacional para el Reino Unido de Vexia, se muestra escéptico ante el hecho de que la información recopilada por el software de Bosch logre marcar una gran diferencia. "Creo que la ruta óptima sería la misma sin importar qué vehículo estés conduciendo," afirma.
Esto puede ser cierto para trayectos cortos, señala Meyer, aunque el sistema sugerirá distintas rutas para viajes más largos. Según Meyer, ECO2 entrará en producción este verano y se integrará en los sistemas del panel de navegación de cierto número de automóviles, aunque no quiso especificar qué marcas ni modelos.
John Holland, director general de Journey Dynamics, una empresa de tecnología de tráfico con sede en Guildford, Reino Unido, afirma que evitar el tráfico afectará al consumo de combustible de forma más dramática, puesto que un vehículo en movimiento continuo no se acelera tanto como un vehículo que tenga que detenerse y seguir adelante repetidas veces por culpa del tráfico. No obstante, y por ahora, según afirma Holland, la mayor influencia sobre el consumo de combustible viene dada por el comportamiento del conductor. El hecho de poder avisar al conductor de los momentos en que está sobreacelerando el coche, decididamente puede influir en la cantidad de combustible que se acabe utilizando, señala. Meyer está de acuerdo con que el comportamiento del conductor es un factor importante, y ha asegurado que Bosch también está trabajando en esa cuestión.
Holland cree, igualmente, que no es necesario el aumento del 9 por ciento en la duración del trayecto. "Existen buenas evidencias que afirman que una conducción económica no necesariamente significa un trayecto más largo. Esto no significa tener que conducir como una abuela a 40 millas por hora por la autopista. "