Este tipo de trabajadores carece de las mismas protecciones que los empleados por cuenta ajena. Si no trabajan, no cobran, y las medidas de empresas como Uber y Amazon para hacer frente a la vulnerabilidad de este colectivo no parecen estar ayudando demasiado
La gran diferencia: el creciente brote del coronavirus está generando miedo y confusión entre los autónomos, un grupo profesional que no goza de las mismas protecciones que tienen los trabajadores indefinidos.
Si no hay trabajo, no hay ingresos: aunque muchas compañías han implementado el teletrabajo, esa no es una opción para quienes trabajan en primera línea, como conductores y mensajeros. Los autónomos cobran por hora o por servicio, así que, si no trabajan, no ganan nada. En declaraciones a The Guardian, el trabajador autónomo de Google Josh Borden afirmó: "Ahora, nuestra posición social de segunda categoría tiene implicaciones de salud literales".
Distintas respuestas: Uber afirmó la semana pasada que podría suspender la contratación de cualquier conductor que dé positivo por el coronavirus (no está claro cómo lo llevaría a cabo). Amazon aseguró que no creará puntos de asistencia para los trabajadores que no se presenten en sus almacenes durante la crisis. Y Amazon, Instacart, DoorDash, Uber y Lyft han prometido dar a sus trabajadores de hasta dos semanas pagadas de baja por enfermedad si pueden demostrar que han sido diagnosticados o puestos en cuarentena debido al COVID-19. En EE. UU., donde la sanidad universal no existe, algunas de estas compañías están recaudando fondos para ayudar a sus autónomos a pagar sus facturas médicas.
La gran respuesta: de momento, parece que estas medidas no están ayudando a calmar las preocupaciones de los trabajadores. En una entrevista con la revista MEL, una mujer autónoma llamada Debbie, quien como muchos conductores y mensajeros trabaja con varias aplicaciones, afirma: "He realizado entregas esta semana a muchos clientes que abren la puerta y parecen enfermos. ¿Qué pasa si están en cuarentena? ¿Qué pasa si están en autocuarentena? Cada vez que hago una entrega, me estoy poniendo en riesgo, pero no hay forma de evitarlo".
Tendencias a largo plazo: por ahora, las personas parecen centrarse en que pasen los próximos días y semanas. Pero el coronavirus ha mostrado claramente la dolorosa y generalizada desigualdad del sector tecnológico. El mes pasado, los trabajadores de Instacart votaron para sindicalizarse. Veremos si otros siguen su ejemplo.