Ante la imposibilidad de las empresas para medir el rendimiento de su inversión en formación online, los proveedores de estos cursos, como Coursera, edX y Udacity, han empezado a usar inteligencia artificial para mejorar la eficacia de sus programas y emparejarlos con los empleados más adecuados
El problema del aprendizaje corporativo online es que hay tantas clases disponibles en plataformas como Coursera, edX y Udacity que las empresas no saben cuáles son los contenidos más adecuados para sus empleados. Y cuando logran elegir uno, les cuesta identificar qué habilidades adquieren los trabajadores y en qué grado. Las empresas necesitan una métrica objetiva para evaluar sus habilidades.
Coursera ha lanzado una nueva herramienta de inteligencia artificial (IA) que aspira a convertirse en esa métrica. Gracias a esta función, las empresas que se suscriben a sus programas de formación pueden ver qué empleados obtienen puntuaciones más altas en las clases de Coursera, comparar las habilidades de sus empleados con las de sus competidores e identificar los mejores cursos para llenar las lagunas de conocimiento de su fuerza laboral. La herramienta, que se lanzará este año y funciona con aprendizaje automático, estará disponible en el tablero online de los perfiles de las empresas en Coursera.
La nueva función es solo un ejemplo de cómo los proveedores de formación online están empezando aprovechar la IA para emparejar a los alumnos con los cursos más adecuados, evaluar sus capacidades y ajustar el contenido de la clase en función de los comentarios. El equipo de científicos de datos de Coursera hace todo, desde "recolectar y almacenar datos hasta interpretar la información para tomar decisiones internas y construir algoritmos que retroalimenten el sitio", explica la directora del grupo, Emily Glassberg Sands.
El equipo de investigación de IA de Udacity, creado en 2017, analiza la opinión de los estudiantes para mejorar las lecciones, y analiza si a los usuarios les gustan los cambios aplicados. Udacity también usa chatbots basados en inteligencia artificial para ayudar a los estudiantes a encontrar cursos relevantes y responder preguntas frecuentes durante el proceso de inscripción. Por último, edX utiliza la IA para aumentar la capacidad de aprendizaje y enseñanza de usuarios y profesores.
Dado que estos son algunos de los retos más complejos y perjudiciales de la formación online, la contribución de la inteligencia artificial al sector podría animar a que más personas y empresas se sumen a esta forma de aprendizaje. Aumentar la efectividad de los programas educativos y medir su impacto son las dos prioridades principales para las empresas que pagan por capacitar a su personal, según una encuesta de 2017 en EE. UU. realizada por la revista Training.
El mercado de la formación online tiene mucho margen de crecimiento; el programa de Negocios de Coursera, dirigido a empresas, ya cuenta con 1.400 clientes (en general, Coursera tiene 31 millones de estudiantes, lo que lo convierte en el proveedor de aprendizaje online más grande del mundo). "El talón de Aquiles de la industria del aprendizaje corporativo es que nadie sabe cómo demostrar el retorno de la inversión", señala la directora del programa de Negocios de Coursera, Leah Belsky. "Las empresas saben que sus trabajadores necesitan aprender nuevas habilidades para seguir siendo competitivas, pero les cuesta comunicar cuál es el valor de ese aprendizaje", añade.
Coursera, también, quería cuantificar los beneficios de sus clases. Así que hace un año y medio, su equipo de ciencia de datos comenzó a desarrollar algoritmos de aprendizaje automático para mapear las 40.000 habilidades que se enseñan en la plataforma de Coursera. El equipo utilizó el procesamiento del lenguaje natural (NLP) para determinar la frecuencia con la que los profesores mencionaron determinados conceptos durante sus clases. Con esa información, el equipo pudo identificar qué habilidades se ofrecían en cada caso. Según Glassberg Sands, este proceso es importante porque mientras que los formadores piensan que están enseñando conceptos teóricos, los estudiantes quieren aprender herramientas y tecnologías específicas.
Foto: Las empresas que se suscriban a Coursera podrán ver su rango en comparación con sus competidores en habilidades específicas. Crédito: Coursera.
Más recientemente, el equipo incorporó una metodología psicométrica llamada teoría de respuesta al ítem (TRI) en algunos de sus modelos de aprendizaje automático. El objetivo de este enfoque era medir las habilidades de los alumnos en función de su rendimiento en los cuestionarios y tareas de Coursera. Mediante una serie de preguntas de distintos niveles de dificultad, el equipo fue capaz de medir las aptitudes de los alumnos en una determinada área, explica Glassberg Sands.
Esta información es importante porque, en general, un alumno más avanzado elegirá cursos más difíciles y planteará preguntas más complejas que un principiante. Para obtenerla, el modelo de TRI determina qué habilidades evalúa cada pregunta y su nivel de dificultad, antes de evaluar el dominio del alumno. "Lo que se obtiene es un percentil para sus empleados en cada área de habilidades, en relación con cualquier grupo de comparación que elija, ya sean todas las empresas de Coursera o solo las empresas de su industria o su país o empresas de un tamaño similar", detalla la responsable .
La mayoría de los proveedores de formación online permiten a sus clientes corporativos ver cuáles de sus empleados están inscritos en las clases, cómo están progresando y los comentarios que hacen sobre sus experiencias. Coursera dice que el aprendizaje automático le permite examinar el desempeño de sus millones de estudiantes y ofrecer predicciones, como el nivel de habilidad de un alumno determinado y otras métricas básicas. En teoría, estos modelos de aprendizaje automático también deberían ser más inteligentes a medida que los alumnos y profesores generen más datos para retroalimentar el sistema.
Foto: Las empresas también podrán ver cuáles de sus empleados demostraron el mayor dominio de ciertas habilidades. Crédito: Coursera.
Coursera espera que la información del análisis comparativo de habilidades, que se actualizará diariamente, sea útil para los especialistas en aprendizaje y desarrollo, los profesionales de recursos humanos y los responsables de contratación. Antes, estos expertos debían qué habilidades estaban adquiriendo otras empresas y cuáles de sus empleados eran los más expertos en, digamos, un lenguaje de programación particular. Pero como toda moneda tiene dos caras, algunos estudiantes de Coursera no quieren que sus jefes tomen decisiones laborales en función de su rendimiento en los cursos online.
Glassberg Sands y Belsky sostienen que la tecnología ofrecerá aún más beneficios, como la posibilidad de identificar a empleados muy valiosos que de otro modo pasarían desapercibidos. El gigante del software Adobe, que ha estado probando la nueva función de Coursera durante el último mes, está de acuerdo. El director del programa de aprendizaje digital de la compañía, Justin Mass, afirma: "Probablemente tenemos algunos expertos en oficinas remotas donde es muy difícil identificar su nivel de talento. Estas funciones nos dan una idea real de lo que nuestros empleados saben y en lo que son buenos, lo que debería ayudarnos a evaluar el talento de forma más inteligente".