Inteligencia Artificial
La lenta apuesta de FedEx por los robots repartidores puede redefinir la industria
Aunque parecía que la compañía se estaba quedando rezagada frente a Amazon y Uber, el gigante de los envíos está invirtiendo en camiones autónomos, inteligencia artificial y una 'app' para Alexa
Crédito: Justin Sullivan (Getty Images).
Si un paquete debe ser entregado al día siguiente, sin excepción ni errores, puede que FedEx emplee a un robot para realizar la exigente tarea.
El director informático de FedEx, Rob Carter, dice que el gigante de los envíos tiene en mente pequeños vehículos que podrían navegar por los barrios y realizar entregas sin conductores humanos.
Carter es el responsable de fijar la agenda tecnológica de las varias empresas operativas de FedEx, entre las que se incluyen su servicio de envíos Express de aviones y camiones, y su servicio de entrega de oficinas y domicilios Ground, que opera en 220 países. El responsable ha descrito a MIT Technology Review algunas de las iniciativas con tecnologías emergentes de FedEx en inteligencia artificial (IA) y robótica. Las inversiones de la compañía en estas tecnologías podrían redefinir el mercado multibillonario de la logística, y cambiarlo todo, desde cómo se envían y reciben los paquetes hasta el movimiento global de grandes flotas de vehículos.
Por ejemplo, algún día se podría encargar un envío de FedEx mediante un asistente virtual doméstico que responda a la voz, como Amazon Echo o Google Home. Carter explica que FedEx ya ha desarrollado una app para Alexa habilitada por la IA que llegará a entender peticiones como: "Alexa, prepara un envío".
"Podrás hacer un pedido simplemente hablando y [Alexa] planteará las preguntas acertadas para asegurarse de que hayas completado el trabajo previo y después podrás esperar a que un camión se presente en la puerta de tu oficina, recoja los paquetes y los envíe a su destino", explica. Al eliminar el tedioso proceso de rellenar formularios y recorrer menús de opciones, la app podría optimizar el proceso de envío e impulsar la satisfacción de cliente. Pero aún está en una de las primeras fases de su desarrollo.
FedEx también está investigando cómo podría automatizar aún más el transporte. Carter detalla que la empresa está colaborando con la start-up Peloton Technology, cuya tecnología semiautónoma vincula camiones electrónicamente para formar pequeños convoyes llamados pelotones. El sistema emplea la comunicación inalámbrica entre vehículos para que solo haya un conductor como la cabeza del pelotón responsable de controlar el gas y los frenos de un camión que le siga de cerca. Además reduce la resistencia al viento, lo que ahorra combustible. La tecnología se considera un importante paso hacia camiones totalmente autónomos, y Peloton Technology ha dicho que lo lanzará a finales de 2017.
Carter asegura que a FedEx también "le interesan muchísimo" los camiones totalmente autónomos y ha unido fuerzas con varias automovilísticas especializadas, incluida Daimler y su división de camiones de transporte y Volvo. Daimler ha pilotado camiones semiautónomos en carreteras de EEUU y Alemania, mientras que Volvo demostró recientemente un camión totalmente autónomo en una mina subterránea sueca. Carter dice que espera ver "importantes implementaciones" de vehículos autónomos en la industria de los envíos dentro de 10 años, pero rehusó especificar cuándo FedEx empezará esta transición.
La empresa está considerando automatizar la entrega de paquetes hasta cierto punto, pero no mediante drones convencionales, o al menos no en un futuro previsible. Carter se autodescribe como un "ávido aficionado de los drones", pero dice que los modelos orientados a las entregas tienen "una capacidad bastante limitada", puesto que la mayoría no puede levantar objetos de más de 2,25 kilos ni volar más allá de unos 80 kilómetros. También cita como barreras los retos de ganar la aprobación para operar drones en zonas densamente pobladas y de asegurarse de que los dispositivos no dañen a niños o mascotas que se acerquen a ellos.
Carter cree que los drones de ala fija que recorren distancias establecidas, entre puntos específicos de salida y de llegada, podrían ser viables para entregas comerciales, pero en general se decanta a favor de robots sobre ruedas en lugar de volantes. Y puesto que la gente ya está acostumbrada a que los carteros acudan a sus domicilios y negocios y coloquen el correo en receptáculos predefinidos, los futuros robots de mensajería de FedEx podrían entregar paquetes de una manera similar.
Invertir en tecnologías futuras, sin importar lo prometedoras que sean, no tiene demasiadas probabilidades de ahuyentar las críticas de que FedEx se está quedando rezagada respecto a otras empresas que están cogiendo la delantera, como Amazon y Uber. Ambas ya han lanzado entregas alimentadas por dron y semiremolques autónomos en meses recientes. UPS, el principal rival de FedEx, también lleva desde septiembre de 2016 probando públicamente entregas de paquetes alimentadas por dron. El analista de Technavio Bharath Kanniappan cree que FedEx se está quedando rezagada respecto a la competencia en términos de incorporar robots en su sistema de entregas. Sin embargo, sugiere que el retraso de la empresa probablemente nazca de un deseo de asegurarse de poder seguir entregando paquetes "con el máximo cuidado", algo que señala como la "propuesta comercial única" de la empresa dada su reputación como mensajero exprés.
El líder la consultora de transporte y logística SJ Consulting Group, Satish Jindel, cree que FedEx está realizando las apuestas correctas para una empresa pública sujeta a un profundo escrutinio. "Están centrados y despliegan tecnologías en áreas donde divisan un retorno desde un punto de vista de costes", afirma Jindel, al señalar que los accionistas de FedEx esperan que la empresa genere beneficios, mientras que los accionistas de Amazon aceptan los caros riesgos que asume la empresa.