Foto: La máquina de telepresencia Beam+ se vende como una forma de seguir en contacto con la familia a distancia.

Cuando Scott Hassan fue a Las Vegas (EEUU) para la Feria Internacional de Electrónica de Consumo (CES, de sus siglas en inglés) la semana pasada, pudo seguir despertando a sus hijos por la mañana y ayudándolos a hacerse el desayuno en su casa de California (EEUU). Hassan usó una pantalla sobre ruedas controlada a distancia para pasar tiempo con su familia, y este miércoles su empresa, Suitable Technologies, ha empezado a aceptar pedidos para Beam+, una versión de esta misma tecnología de telepresencia para usuarios domésticos. Este verano estará disponible a través de Amazon y otras tiendas.

Hassan cree que el Beam+, básicamente una pantalla de 10 pulgadas y una cámara montadas sobre ruedas, será popular entre otros hombres de negocios que quieren pasar más tiempo con sus hijos, o quienes tienen padres ancianos a los que les gustaría visitar más a menudo.

Hassan afirma que alguien que "visite" a sus padres así podría estar al tanto de las cosas de una forma menos intrusiva que a través del teléfono, paseándose para buscar señales de que han tomado su medicación, por ejemplo, en vez de preguntar directamente. O esperando a comprobar que se toman sus pastillas con la comida. "Para quienes tienen demencia o Alzheimer, creo que poder ver, oír y pasear con una cara conocida es mucho mejor que una llamada de teléfono", sostiene. "También puedes conectarte y ver un concurso con tu abuela en la tele".

El Beam+ está diseñado para que, una vez instalado en una casa, cualquiera que esté registrado para ese aparato pueda darle vida y empezar a moverse. La interfaz de quien lo opera muestra la imagen que toma una cámara colocada encima de la pantalla, así como una imagen más pequeña dirigida a la base de la unidad como ayuda a la hora de desplazarse. El usuario la maneja moviendo un ratón sobre su imagen y haciendo clic donde quiere ir.

Las primeras mil unidades de Beam+ se pueden encargar por 995 dólares (unos 725 euros) y se espera que las unidades siguientes cuesten 1.995 dólares (unos 1.450 euros). Ambos precios incluyen la estación de carga a la que el dispositivo debe volver cada dos horas. El diseño exterior del Beam+ es del diseñador del termostato Nest, además de otros aparatos, Fred Bould.

El Beam+ es una versión más barata, más pequeña y rediseñada del primer producto de la empresa, llamado Beam, que está dirigido a usuarios empresariales (ver "Acude al trabajo en un cuerpo bajo control remoto").

Intel, IBM y Square usan el producto original de Beam para dar a sus empleados una opción más entre un chat de vídeo convencional y una visita en persona a compañeros de oficinas remotas. Hassan afirma que hay otras empresas además de las tecnológicas que han mostrado interés. En Las Vegas vendió dos dispositivos Beam al dueño de un restaurante que los pensaba usar para captar clientes en la calle; y una agencia inmobiliaria de Lake Tahoe, California (EEUU), ha empezado a usarlos para enseñar pisos de lujo.

Varias start-up y grandes empresas como iRobot, creadora de la aspiradora robótica Roomba, han lanzado dispositivos de telepresencia móvil en los últimos años. Sin embargo, a pesar de que está claro que hay mucha gente a la que le gustaría que fuera más sencillo viajar tanto en su vida profesional como en su vida personal, a veces los dispositivos resultantes son muy aparatosos y siguen siendo relativamente caros.

Hassan afirma que una razón por la que su empresa está lanzando un producto de consumo es intentar mantener bajo el precio. "Si no manejas un gran volumen, no consigues el precio adecuado por los componentes", afirma.