Se presenta una nueva herramienta diseñada para que el historial de navegación nos sea más útil.
Los navegadores de Internet son capaces de recordar las páginas que hemos visitado con anterioridad, pero muy poca gente realmente utiliza esta información. Jing Jin, una estudiante graduado de la Universidad de Carnegie Mellon, ha desarrollado junto a sus colegas una nueva herramienta para el historial de los navegadores, basándose en un estudio sobre cómo utilizan los usuarios dicho historial de sus navegadores. Mostraron el prototipo durante una presentación esta semana en la Computer-Human Interaction (CHI 2009) Conference, en Boston.
“A pesar de que los marcadores de páginas favoritas y el historial de sitios web visitados son parte de todos los navegadores, hemos descubierto que la gente suele utilizar motores de búsqueda o prefieren reconstruir el camino por el cual llegaron a una página en primer lugar,” comenta Jason Hong, profesor asistente en Carnegie Mellon, y que formó parte del proyecto. “La mayoría de la gente cree que el historial web es muy difícil de usar, o ni siquiera saben que existe.”
Los investigadores hicieron pruebas sobre la capacidad de los usuarios para recordar páginas web y llegaron a la conclusión de que las direcciones web (URL) y las descripciones textuales (a partir de las cuales la mayoría de los navegadores organizan sus historiales) no eran tan fáciles de recordar como los colores o las imágenes que se recolectan de esas mismas páginas web. Por tanto, la herramienta desarrollada por los investigadores—que en la actualidad se distribuye como un plugin para el navegador Firefox—permite que los usuarios naveguen a través de las imágenes de las páginas web que han visitado con anterioridad, o que introduzcan palabras de búsqueda para encontrarlas.
Los investigadores también han utilizado la nueva herramienta de historial para mejorar las búsquedas por internet. Para ello han añadido unas imágenes en miniatura provenientes del historial de navegación en la parte superior de los resultados de búsqueda de Google. Las miniaturas son seleccionadas en función de los términos de búsqueda que el usuario introduce en el motor de búsqueda.
A la hora de probar la herramienta, los investigadores descubrieron que gracias a ella los usuarios eran capaces de encontrar la página que buscaban en aproximadamente un minuto de media, en comparación con la media de tres minutos que se tarda si utilizamos un historial de navegación tradicional. Las pruebas de usuario también demostraron que con este prototipo la gente era capaz de encontrar páginas antiguas con más frecuencia.
Eytan Adar, un estudiante de doctorado de la Universidad de Washington, también está investigando nuevas formas de rediseñar el historial del navegador. Eytan señala que el diseño actual no se corresponde con la forma en que los usuarios vuelven a visitar las páginas web. En colaboración con científicos de Microsoft Research, Adar descubrió que la gente suele visitar las páginas web siguiendo una serie de patrones. Comenta que quizá sea posible dividir el historial para que gestione las páginas en función de dichos patrones. Por ejemplo, aquellas páginas que los usuarios visitan con mucha frecuencia en un corto periodo de tiempo podrían aparecer bajo una “lista de trabajo” temporal, señala Adar. Las páginas que se visitan con regularidad se mostrarían en una lista con carácter más persistente, mientras que las páginas que apenas de vuelven a visitar se podrían acceder mediante funciones de búsqueda.
Sin embargo, algunos expertos opinan que el historial de los navegadores no es una función que necesite tantos cambios como los investigadores sugieren. Larry Constantine, un experto en usabilidad y profesor en la Universidad de Madeira, Portugal, señala que algunos navegadores ya utilizan la información del historial de forma sofisticada pero discreta frente a los ojos del usuario. Por ejemplo, el navegador Firefox 3 es muy bueno a la hora de adivinar direcciones web (URLs) a partir del historial y según las palabras que se vayan tecleando en la barra de direcciones. El hecho de que el historial del navegador nos resulte útil o no, comenta, “depende de qué versión del navegador se esté utilizando y de los hábitos personales del usuario.”
Jared Spool, director y fundador de User Interface Engineering, una empresa de consultoría con sede en North Andover, Massachussets, afirma que la gente suele volver a visitar ciertas páginas siguiendo los mismos pasos que utilizaron para llegar a ellas en primer lugar. “Suena un poco cliché, pero realmente somos animales de costumbres,” comenta.
Si el primer camino que utilizamos para llegar a la información nos funcionó bien y rápido, es antinatural que intentemos buscar un segundo camino, señala Spool, quien tampoco está seguro de que los usuarios fueran a cambiar sus comportamientos incluso si el historial estuviera mejor diseñado, aunque ve el potencial de este rediseño para tareas específicas. Por ejemplo, Spool opina que los autores podrían usar este tipo de historial mejorado para volver a visitar las páginas donde realizan sus investigaciones, o los empleados de una firma podría usar esta herramienta para navegar con más facilidad a través de redes de intranet mal organizadas, cuyos contenidos pueden resultar más difícil de encontrar que los contenidos en internet.
Spool afirma que las ideas que sustentan este prototipo de herramienta de historial seguramente acaben filtrándose en los productos de consumo de forma muy distinta. “Lo que tenemos ante nosotros es el primer paso del proceso de polinización,” señala.
De hecho, los investigadores de Carnegie Mellon señalan que los navegadores ya han empezado a explorar formas alternativas de utilizar la información que recogen acerca de los hábitos de navegación de los usuarios. Por ejemplo, el navegador Chrome de Google posee una página de “marcado rápido” que aparece cuando el usuario abre una nueva pestaña, y que muestra imágenes en miniatura de las páginas web visitadas con más frecuencia. Jason Hong, de Carnegie Mellon, opina que un rediseño del historial del navegador podría ser especialmente útil para aquellos usuarios de internet con menos conocimientos de navegación, que quizá tengan más problemas a la hora de recrear los pasos que les llevaron a dar con una página de información concreta.