No siempre es necesario utilizar tecnología punta para resolver los problemas. Un sistema de riego que funciona con energía solar, un dispositivo portátil para la detección de la malaria o un microscopio hecho de papel pueden ayudar a millones de personas en los países menos desarrollados
1. Sales de rehidratación oral para sobrevivir a una diarrea
A principios de la década de 1990, las enfermedades diarreicas mataban cada año a unos 5 millones de niños menores de cinco años. Ese número se ha reducido a aproximadamente 1,5 millones gracias a las sales de rehidratación oral, una mezcla de sal y azúcar que se puede disolver en agua y administrar en el hogar. Algunas veces se añade zinc a la mezcla para reducir la gravedad y la duración de la diarrea. Esta simple innovación quizás ha salvado más vidas que cualquier otra a un coste tan bajo.
2. Un sistema de riego barato y de bajo consumo
El riego representa la mayor parte del uso de agua dulce en la mayoría de los países, alrededor de tres cuartas partes del total. El riego por goteo utiliza la mitad de agua que el riego convencional y es mucho más productivo. Pero es caro y en general requiere energía eléctrica. El laboratorio GEAR en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (EE. UU.) ha desarrollado sistemas de riego por goteo a baja presión que funcionan con energía solar y que pueden aportar beneficios a un coste mucho menor.
3. Microrredes de corriente continua
Las placas solares pueden proporcionar electricidad barata y descentralizada. Pero si se conectan a dispositivos convencionales y a una red doméstica normal, consumen mucho en la conversión de la corriente continua a la corriente alterna y viceversa. Una pequeña red de corriente continua bien diseñada puede ahorrar una cantidad sustancial de energía al eliminar esta necesidad.
4. Mejores estufas de leña
La deforestación es un problema importante en gran parte de los países en vías de desarrollo, como lo es el daño a la salud humana que proviene de la inhalación de partículas del humo de las estufas de leña. Las estufas mejor diseñadas, como la Berkeley-Darfur, usan solo la mitad de combustible para cocinar una cantidad similar de alimentos y también reducen las emisiones de partículas a la mitad.
5. Filtros de agua simples y efectivos
Cientos de millones de personas en todo el mundo carecen de acceso a agua potable. Los filtros de agua simples y baratos usan ceniza combinada con nanopartículas de plata para filtrar las impurezas y los patógenos. Han mejorado la vida de cientos de miles de personas.
6. Bidones de agua Hippo Roller
Centenares de millones de personas, generalmente mujeres, tienen que caminar todos los días para recoger suficiente agua para sus necesidades básicas y transportarla a casa en baldes. El bidón de agua Hippo Roller es de plástico resistente y se puede voltear de costado y rodar hacia el hogar sobre un terreno irregular, por medio de un mango adjunto.
7. Inyecciones a chorro
Las vacunas son cruciales para la salud pública. Pero en los países en desarrollo, lograr distribuir la vacuna donde se necesita es solo una parte del problema. ¿Cómo administrarla en un lugar donde las agujas estériles podrían ser escasas? Una solución es un inyector a chorro, un invento de hace décadas que puede introducir un flujo de fluido dirigido a alta presión a través de la piel.
8. Microscopios de papel
Los microscopios son cruciales para diagnosticar enfermedades infecciosas. Pero en cierto sentido son el peor dispositivo posible: pesado, costoso y difícil de mantener. El microscopio de papel, también conocido como Foldscope, contiene todas las partes necesarias dentro de una hoja de papel plegable. Se pueden optimizar para diferentes enfermedades y cuestan menos de un dólar.
9. Sistema de comunicaciones para desastres naturales
Los teléfonos móviles son comunes incluso en los países pobres, pero cuando ocurre un desastre natural, las redes de comunicaciones de las que dependen estos dispositivos podrían fallar. Desarrollado en Chile, SiE es un sistema que codifica texto en tonos de audio de alta frecuencia que se pueden distribuir a través de ondas de difusión de radio y recibirse en cualquier teléfono inteligente sin necesidad de infraestructura de internet. Una aplicación en el teléfono escucha estos tonos y los transforma en un mensaje de texto.
10. Un dispositivo portátil para la detección de la malaria
La malaria mata a 1.200 niños al día. El diagnóstico y el tratamiento rápidos son cruciales, pero eso generalmente requiere un microscopio y un técnico fiable para analizar las muestras de sangre. Un sistema más rápido y simple desarrollado el año pasado en la Universidad del Sur de California (EE.UU.) es portátil y detecta los niveles de hemozoína, un subproducto creado por el parásito de la malaria, que revela hasta qué punto ha progresado la enfermedad.