María Paz Álvarez (Argentina), 28
Zavia Bio
Su 'start-up' biotecnológica aumenta la tolerancia a la sequía de los cultivos para afrontar la crisis climática
La crisis climática está provocando un aumento en la frecuencia e intensidad de sequías que afectan a los cultivos. La agricultura uno de los sectores más dañados por las olas de calor extremas y el cambio climático provocado por la quema masiva de combustibles. El cambio climático se suma a las tensiones inflacionistas de alimentos como el trigo, el maíz y los frijoles, de forma que, según estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el precio de algunos de estos cultivos podría aumentar más de un 40% hasta el 2050.
Nieta de agricultores, la joven argentina María Paz Álvarez, licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad de Congreso, ha decidido aplicar nuevas tecnologías para preparar los cultivos para el caos climático que ya estamos viviendo. Desde Zavia Bio, su start-up de agrobiotecnología que desarrolla insumos biológicos para dar solución a los problemas de los cultivos y aumentar su tolerancia a la sequía. Por este avance, Álvarez ha sido escogida por MIT Technology Review en español como una de los ganadores de Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2023.
Su primer producto es Z-Active, un líquido que se basa en moléculas naturales de las propias plantas potenciadas con biotecnología que se aplican en las hojas de las plantas que favorece la adaptación a condiciones de falta de agua. “Reducimos las pérdidas de cosechas en un contexto de sequía; es una herramienta para aumentar la producción y los ingresos de los agricultores en condiciones de crisis climática”, explica esta joven innovadora. Esta sustancia es una alternativa sostenible a agroquímicos que son nocivos con el medio ambiente. "Gracias a la ciencia y la tecnología, hacemos que vayan de la mano dos actividades que siempre han estado contrapuestas: la producción agroalimentaria y el cuidado del medio ambiente", explica.
Otras vías que investigan en Zavio Bio son los bioherbicidas que afrontan la resistencia de las malezas con sustancias biodegradables. También están desarrollando proteínas que mejoran la conservación de la cosecha y que mejoran el sistema de defensa de las plantas frente a los patógenos.
Todo esto va en la línea de las medidas para adaptarse y reducir la vulnerabilidad al cambio climático que prescriben instituciones internacionales como el BID: “Además de mitigar el cambio climático, la agricultura debe adaptarse para reducir la vulnerabilidad ante esta amenaza con variedades menos susceptibles, un mejor uso del agua y nuevas tecnologías que aumenten la productividad a la vez que reducen la vulnerabilidad y las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Desde Argentina, Álvarez espera ayudar a los grandes graneros del mundo como Brasil y Estados Unidos con nuevos productos sostenibles que afrontan los problemas de la agricultura. La cocreadora de Zavio Bio quiere que sus productos sean una solución para los productores de alimentos de todo el mundo.