Tristan Copley Smith (Reino Unido), 33
OSBeehives
Monitoriza la salud de las abejas con IA, IoT y trabajo colaborativo para prevenir su extinción
La población mundial de abejas está amenazada y su mortalidad no para de aumentar. En Europa, casi una décima parte de las especies de este insecto se enfrenta a la extinción, según la Lista Roja de la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza. En EE. UU., los apicultores perdieron el 42 % de sus colonias, solo entre 2014 y 2015.
Las consecuencias de la desaparición de las abejas son inconmensurables, pues son vitales para el desarrollo natural de los ecosistemas salvajes y como polinizadoras en la agricultura. De hecho, de su polinización depende un tercio de los alimentos que comemos, según un estudio de la Universidad de Berkeley (EE. UU.). En particular, la abeja occidental, Apis mellifera, es la polinizadora más conocida y es precisamente el objeto de estudio del proyecto OSBeehives.
Esta empresa social, fundada en 2015, desarrolla software y hardware para luchar por la conservación de esta abeja. Estas tecnologías analizan las frecuencias de audio que generan sus zumbidos y los correlacionan con su estado de salud mediante aprendizaje automático. "El tiempo para aprender los patrones de las abejas depende de su subvariedad genética y de factores medioambientales. Por ejemplo, si hace mucho frío las abejas no se van de la colmena y el ruido será muy alto durante todo el día", explica el cofundador y director de comunicaciones de OSBeehives, Tristan Copley Smith, cuya iniciativa le ha convertido en ganador de Innovadores menores de 35 Europa 2019 de MIT Technology Review en español.
Entre las principales amenazas de las abejas están el uso de pesticidas, enfermedades y parásitos, y el conocido como problema del colapso de colonias. Por eso, analizar su salud es tan importante. Smith detalla: "Estamos entrenando al algoritmo de inteligencia artificial y haciendo constantes mejoras para refinar la solución con los datos que recogemos". Para capturar esta información, utiliza su dispositivo BuzzBox, un sensor conectado que se coloca en la colmena y que "monitoriza la salud de las abejas".
La información se traslada a una app móvil para que el apicultor pueda reaccionar en tiempo real. La segunda versión del dispositivo, BuzzBox Mini, tiene el tamaño de un smartphone para que sea fácil de colocar en cualquier tipo de colmena. "El sitio ideal es lo más cerca posible de la reina", detalla Smith. Este emprendedor social multidisciplinar es fundador de otras dos start-ups de tecnología, y está muy enfocado en desarrollar modelos de código abierto para obtener beneficios sociales y medioambientales.
Con más de un millón de grabaciones de audio de usuarios de más de 20 países alrededor del mundo y más de 2.000 usuarios, OSBeehives está ya trabajando en una tercera iteración de BuzzBox. Lo que distingue a su dispositivo de otros es que resulta económicamente asequible y se ofrece en código abierto, lo que contribuye a una evolución más rápida.
El inventor y emprendedor Javier Agüera, miembro del jurado de Innovadores menores de 35 Europa 2019, considera que "los datos que están recogiendo son de vital importancia y las herramientas que están desarrollando están siendo muy bien recibidas". El también jurado de la competición y director de investigación de Gartner, Erick Brethenoux, destaca que el proyecto "resuelve un gran problema medioambiental a nivel mundial" y resalta su enfoque multidisciplinar: "Es muy refrescante ver este tipo de inteligencias tecnológicas, sociales y ecológicas en funcionamiento".