
Cuando tenía 15 años, Oriol Vinyals se obsesionó con StarCraft, un videojuego en el que tres facciones luchan por el control del mapa, como el ajedrez, pero con piezas negras, blancas y rojas. Vinyals pronto se convirtió en el jugador mejor clasificado de España. “Sabía casi que el juego regresaría más tarde en mi vida”, dice. “Me fascinaban los problemas de inteligencia artificial que presenta.”
Pasaron más de diez años antes de que la premonición de Vinyals se hiciera realidad. Mientras estudiaba en UC Berkeley, ayudó a crear un bot de inteligencia artificial capaz de jugar StarCraft de manera autónoma. El bot, ominosamente llamado Overmind, representaba un triunfo en el aprendizaje automático.
Mientras trabajaba en el equipo de Google AI, creando nuevas técnicas para la traducción, la inspiración lo golpeó.
Más tarde, mientras trabajaba en el equipo de Google AI desarrollando nuevas técnicas de traducción, Vinyals decidió ver si una computadora podría escribir una descripción precisa de una imagen. Es una forma de traducción, aunque de píxel a título. “Lo recuerdo tan bien”, dice. “Cambié una sola línea de código: en lugar de traducir del francés, cambié mi código para introducir una imagen.” Al día siguiente, Vinyals mostró a su programa una fotografía de un bullicioso puesto de mercado, con el suelo junto a él cubierto de plátanos. El título decía: “Un grupo de personas de pie en el mercado comprando frutas.” “¡Funcionó!”, recuerda. “No solo decía ‘Gente en la calle’. Estaba leyendo la imagen con sofisticación.” La tecnología, que ahora se está incorporando a la búsqueda de imágenes de Google, permite que las computadoras hagan subtítulos a las imágenes y las muestren a las personas que ingresan términos de búsqueda relevantes.
Vinyals y sus compañeros de trabajo han desarrollado una tecnología que ahora se usa en Gmail llamada Smart Reply, que sugiere automáticamente respuestas cortas a los correos electrónicos. Y ahora, habiendo unido al equipo de Google DeepMind en Londres, ha cerrado el círculo. Allí, está trabajando para crear computadoras que puedan enseñarse a sí mismas a jugar y ganar juegos complejos, no mediante la codificación rígida de las reglas, sino permitiéndoles aprender de la experiencia.