Puentes, casas y ¡hasta bodas! Aunque la fiebre por la tecnología haya decaído un poco, hay quien sigue empujando sus límites con creaciones increíbles. Le presentamos nuestra lista de favoritos
Como apasionada de la fabricación aditiva, cuando llegó el momento de planear el gran día decidí que cada detalle posible estaría impreso en 3D: el ramo, mi diadema, los muñecos de la tarta... No solo fue una boda a medida única sino que me ahorré bastante y a todo el mundo le encantó
El gran avance de esta tecnología en los últimos años y sus múltiples ventajas en sostenibilidad, libertad de diseño y optimización de costes la convierten en una herramienta idónea para restaurar zonas devastadas por desastres naturales y barrios marginales
Aunque parezca un macarrón a medio cocer, esta pieza es el primer paso hacia un pulmón humano artificial apto para trasplante. La famosa emprendedora biotecnológicoa Martine Rothblatt lidera esta iniciativa que podría convertirse en una fábrica sin límites de órganos humanos
En mis prácticas de verano debía agilizar un proceso de fabricación. Y lo conseguí, pero mi éxito le costó el empleo a un trabajador que llevaba 34 años en la empresa. El mejor consejo que puedo dar a quien se dedique a automatizar tareas es hablar con la gente que quedará obsoleta
La fabricación aditiva cada vez es más versátil y ágil, dos características que le están permitiendo penetrar en los procesos de fabricación de industrias de todo tipo. Ya se usa para producir piezas de vehículos, aviones y cohetes, y hasta prototipos de papas fritas
En 2030, la tecnología habrá reconfigurado algunos trabajos actuales y creará otros nuevos, como el de experto en ética de tecnologías públicas y el operario de impresoras en 3D para megaestructuras. Este es el aspecto que tendrán estos empleos según un grupo de artistas
Suelas personalizadas para zapatillas, metales con propiedades asombrosas, piezas de gran tamaño para procesos industriales y velocidades de vértigo son algunos de los grandes avances que la fabricación aditiva consiguió el año pasado. Y la revolución no ha hecho más que empezar
Parece un corazón real y bombea sangre como él, pero empieza a degradarse a los 45 minutos, después de tan sólo 3.000 latidos y requiere una bomba externa para funcionar. Aun así, es lo más cerca que se ha llegado de crear un corazón artificial funcional
Las piezas emergen de un bañera en una sola pieza, como el T-1000 nacía de un líquido metálico. El proceso puede ser miles de veces más rápido que otras técnicas y sirve para imprimir de todo, desde piezas para naves espaciales a suelas de zapatilla