RISC-V, un conjunto de instrucciones de estándar abierto, está cambiando la economía del diseño de los chips, y sacudiendo la dinámica de poder del sector tecnológico
Los diseños de chips informáticos son caros y difíciles de licenciar. Eso está a punto de cambiar gracias al popular estándar abierto conocido como RISC-V
A pesar del enorme crecimiento del sector y de su alzamiento como herramienta corporativa estratégica, aún hay compañías que dudan de sus beneficios y temen incorporarla
Encontrar errores en el código resulta una labor cada vez más complicada para los humanos, por lo que algunos expertos pretenden que las máquinas se programen solas. Un nuevo sistema utiliza aprendizaje automático para ofrecer formas de escribir código más eficientes y proporcionando correcciones
La mayoría de las tecnologías que gobiernan la economía actual se basa en chips cada vez más pequeños y potentes. Pero, a pesar de algunas ingeniosas estrategias, cada vez es más difícil que sigan aumentando su velocidad. O empezamos a invertir en I+D ahora o las industrias no podrán seguir avanzando
OpenTitan es un microprocesador de código abierto que puede ser comprobado en cualquier momento y que incluye un sistema de autodiagnóstico cada vez se que arranca el sistema. Aunque no es perfecto, podría reducir la persistencia de los hackers que ya han logrado acceder a una máquina
Todavía no se conoce ningún microprocesador sin fallos, y aunque el proceso por hacerlos más seguros y repararlos lo antes posible mejora cada día, estas cuatro medidas podrían acelerar el proceso y reducir los riesgos ante los hackers
Varios fabricantes defienden que son los distintos diseños de hardware de los procesadores los que marcarán el futuro de las aplicaciones de inteligencia artificial. Por ello, están explorando enfoques distintos (versátiles, especializados e incluso analógicos) para ver cuáles prevalecen
Ambas compañías trabajan en un nuevo diseño más eficiente enfocado a la ejecución de algoritmos de inteligencia artificial. El dispositivo aumentaría la potencia de cálculo y reduciría la energía necesaria, lo que abarataría el uso del aprendizaje profundo
Tras su tropiezo con el error de seguridad de sus procesadores, la compañía ha presentado un chip neuromórfico que simula el funcionamiento del cerebro humano utilizando una menor potencia computacional que la que se necesita para poner en marcha un ordenador.