La agencia DARPA ha financiado el desarrollo de drones de cartón que podrían llegar a transportar cargas de 10 kilos hasta lugares de difícil acceso y degradarse poco a poco después de entregarlas
Crédito: Cortesía de Otherlab.
Poca gente se presentaría voluntaria para una misión de sólo ida; por suerte, ya existen drones capaces de hacer este trabajo por nosotros.
Con una subvención de la agencia DARPA, Otherlab, de San Francisco (EEUU), ha desarrollado prototipos de drones de cartón, diseñados para lanzar cosas como medicinas, baterías y dispositivos de comunicaciones desde el aire hacia emplazamientos peligrosos o de difícil acceso.
Las aeronaves están preprogramadas con su destino de aterrizaje, y se lanzan desde otro vehículo aéreo (para las pruebas, se empleó otro dron más grande, por ejemplo). Una vez lanzadas, un pequeño conjunto electrónico las dirige hasta su objetivo. Los drones de cartón pueden diseñarse para aprovechar al máximo su carga útil, ya que no necesitan incorporar motores, baterías ni combustible.
Los drones ya han sido empleados para entregar paquetes a clientes de pago de Amazon y fármacos en zonas remotas de Ruanda. El Departamento de Defensa de EEUU también está probando enjambres de drones para un abanico de posibles misiones. Pero el concepto de drones totalmente desechables que se desintegran sí es nueva. En la página web de DARPA que recoge el proyecto, bautizado como ICARUS, la agencia explica que el objetivo es crear drones que "se esfumen del aire" poco después de completar sus misiones.
La ingeniera de Otherlab que trabaja en el proyecto, Star Simpson, detalla que el cartón solo se empleó para demostrar que el diseño funciona. El objetivo final es que los drones estén hechos de fibras de micelio, es decir, champiñones.
En declaraciones a Air & Space, Simpson explicó: "Nuestro trabajo preliminar señala que, básicamente, se puede impregnar [el micelio] con diferentes tipos de esporas [que] se activan justo antes de que el vehículo sea liberado". Las esporas crecerían y literalmente se comerían al dron, devorando su cuerpo en unos cinco o seis días. En cuando a la tecnología del dron, DARPA tiene un programa independiente para financiar el desarrollo de electrónica autodestruible que encajaría muy bien con esta iniciativa.
Las ideas descabelladas no son algo nuevo para Otherlab. Se le conoce por meter mano en todo, desde energías renovables hasta robots hinchables. En una conferencia de prensa sobre el proyecto, indicó que un avión de transporte militar C-130 podría dispersar cientos de drones cargados con suministros sobre una zona del tamaño del estado de California (EEUU) en un único vuelo.
Hasta ahora, el equipo de Otherlab sólo ha probado modelos diseñados para portar una cargas útiles de hasta un kilo, pero Simpson afirma que podrían escalar el diseño hasta una envergadura de 2,4 metros capaz de portar hasta 10 kilos de peso.
(Para saber más: Air & Space, Recode, Los cazas de combate cambian los misiles por enjambres de drones, Ruanda será pionera en entregas aéreas mediante drones para salvar vidas, Amazon logra repartir su primer paquete a domicilio con un dron autónomo)