La reacción entre las bacterias modificadas del yogur y las células tumorales es registrada por un test de orina
Foto: Las tiras de papel mostradas aquí pueden usarse para detectar biomarcadores sintéticos relacionados con enfermedades como el cáncer colorrectal. Las líneas indican la presencia de estos marcadores en la orina.
Una cucharada de yogur pronto podría ser una forma barata y sencilla de detectar el cáncer colorrectal.
La profesora del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, EEUU), Sangeeta Bhatia, está trabajando para reemplazar las costosas e incómodas colonoscopias y resonancias magnéticas por una cucharada de yogur y una prueba de orina, un método barato que podría mejorar el diagnóstico precoz del cáncer colorrectal.
La idea de Bhatia fue crear moléculas sintéticas que pudieran ser introducidas en el cuerpo, interactuar con el cáncer y después ser detectadas fácilmente.
Anteriormente Bhatia había desarrollado nanopartículas capaces de llegar a los tumores, y que después eran descompuestas en pedazos más pequeños por las enzimas producidas por el cáncer. Las partículas descompuestas son lo suficientemente pequeñas como para ser recolectadas y concentradas por los riñones, después de lo cual pasan a la orina.
Durante la primera iteración de la técnica se usaron instrumentos de laboratorio para analizar la orina y detectar los marcadores. Ahora Bhatia ha desarrollado una prueba en papel, como la que se usa para el embarazo. Hasta ahora la prueba ha sido demostrada en ratones para el cáncer colorrectal y la fibrosis hepática.
El trabajo de las nanopartículas, descrito en un artículo a principios de este año, requiere el uso de una inyección. En un trabajo nuevo y aún sin publicar, Bhatia está desarrollando una forma de insertar las nanopartículas en el cuerpo mediante la modificación de un tipo de bacterias que se encuentran en el yogur. Las bacterias producen biomarcadores de nanopartículas mediante la interacción con un tumor.
Bhatia espera que el método "transforme los diagnósticos", y señala que está en el proceso de formación de una compañía para comercializar el enfoque. Dado que la prueba no requiere equipo especializado, será especialmente útil en países pobres, afirma, donde hoy día se realizan pocas detecciones de cánceres comunes entre la población. Pero también podría reemplazar o aumentar las colonoscopias.
Si se detecta a tiempo, el 90% de las personas con cáncer colorrectal sobreviven durante al menos cinco años. Pero sólo el 40% de las personas son diagnosticadas precozmente, en parte porque se hacen revisiones a muy pocas personas, según la Sociedad Americana del Cáncer.
El profesor de ingeniería biomédica en la Universidad de Columbia (EEUU), Samuel Sia, asegura que los biomarcadores sintéticos de Bhatia son un "concepto interesante" con el que crear pruebas de cáncer fáciles y de bajo coste. Añade que las inyecciones de nanopartículas han demostrado un buen grado de fiabilidad, al menos en ratones. Pero sin datos de ensayos clínicos, afirma, "Yo no diría que hayamos llegado aún a una solución".