Alejandro Lozdziejski (Uruguay), 32
Sur3D
Pone la impresión 3D al alcance de cualquiera con su software que permite imprimir diseños propios de forma autónoma y sin conocimientos especializados
"Fue un amor a primera vista", recuerda Alejandro Lozdziejski. Eso es lo que sintió cuando vio funcionar una impresora 3D por primera vez, en una feria de dispositivos Arduino en Italia. Aquella fascinación le llevó, de nuevo en Uruguay, su país natal, a crear una comunidad de personas interesadas en esta tecnología y con un objetivo común: "Acelerar el crecimiento de la impresión 3D en Suramérica". Con esta misión, Lozdziejski lanzó en 2013 su primer emprendimiento: Sur3D, una empresa dedicada a la fabricación integral de impresoras 3D. Soñaba con "crear el modelo más accesible de todo el continente y llevarlo a escuelas locales y lugares de trabajo".
Pero el éxito emprendedor no suele llegar a la primera. La escasa venta de unidades le obligó a pensar en un modelo de negocio más sustentable y competente en el mercado a largo plazo. Decidió trabajar en un nuevo software que permitiese a las personas ser diseñadoras y creadoras de sus propios objetos de forma autónoma y sin ningún tipo de conocimiento técnico. La capacidad de reinventar su idea en una propuesta exitosa ha convertido a Lozdziejski en uno de los ganadores de Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2017 de MIT Technology Review en español.
Desde su origen hasta hoy, Sur3D ha sufrido un giro de 180 grados. Ha evolucionado de un producto de hardware a otro de software que permite democratizar los procesos de fabricación. Su creador detalla: "Abrimos un nuevo paradigma en la relación entre el cliente y el producto. Ahora el cliente es el protagonista. Pasa de consumidor a creador". Lo novedoso de su tecnología, Selva 3D, radica en la posibilidad de imprimir un objeto en un modelo tridimensional a partir de una imagen sin ningún tipo de experiencia previa. El usuario puede previsualizar su propio diseño y generar un archivo que también puede ser usado en cualquier dispositivo de impresión 3D. Lozdziejski destaca: "Tener un objeto único te da un valor muy alto y en Sur3D lo hemos conseguido".
Uno de los principales retos de Sur3D ha sido potenciar la conexión entre el cliente y el producto final. Lozdziejski reconoce que "muchos de los objetos que se fabrican en masa nadie los compra y hay que tirarlos". Por esta razón, este joven uruguayo tiene muy claros sus próximos pasos: "Queremos empujar la industria hacia la fabricación personalizada. No solo por obtener productos de mayor atractivo sino también por apostar por una fabricación más responsable e inteligente que solucione problemas como son la logística y el desecho".
A principios de 2016, Sur3D dio el gran salto al mercado europeo con Selva 3D. El producto llamó la atención de uno de los fabricantes de caramelos más grande del mundo: The Magic Candy Factory. Su software de fabricación a medida ya está implantado en más de 100 tiendas para que niños y adultos sean partícipes del proceso de crear e imprimir golosinas personalizadas. Para este joven uruguayo se trata además de una innovación a nivel mundial, ya que "es el primer software que permite diseñar alimentos en apenas segundos", afirma.
A día de hoy, Selva 3D cuenta con más de 100.000 usuarios registrados y está en funcionamiento en mercados como el de Estados Unidos, India y Reino Unido. Para el experto e inversionista en Latinoamérica y miembro del jurado de Innovadores menores de 35 Latinoamércia 2017, Diego Serebrisky, "Sur3D hace accesible una tecnología en demanda relativamente inaccesible". Según el experto, su potencial para anexar las tradicionales relaciones entre los clientes y las empresas "podría ser aplicable a negocios enfocados tanto a empresas como a clientes directos".