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Los mosquitos modificados genéticamente de su división Oxitec, que producen crías que mueren rápidamente, han sido liberados en Gran Caimán (Reino Unido) y en partes de Brasil para limitar la propagación del Zika y otras enfermedades. En marzo, la Organización Mundial de la Salud recomendó un despliegue piloto de la solución de Oxitec. La empresa ha estado comprando empresas especializadas en la biología sintética para distintas aplicaciones, pero no ha sido clara en cuanto a cómo funciona su tecnología, dando paso a especulaciones negativas acerca de la empresa.

 

 

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