Mark Zuckerberg señala que las búsquedas son una "gran oportunidad" para Facebook, pero niega que la empresa esté desarrollando su propio teléfono inteligente.
Ha guardado silencio desde la salida a bolsa de la compañía en mayo, pero durante una conferencia de tecnología celebrada el pasado martes, el fundador y director general de Facebook, Mark Zuckerberg, charló sobre una serie de temas entre los que estuvieron los planes de la red social para entrar en el negocio de las búsquedas.
Durante una entrevista en TechCrunch Disrupt en San Francisco (EE.UU.), Zuckerberg señaló que los usuarios de Facebook realizan unos mil millones de consultas por día "prácticamente sin querer". Según indicó, la mayoría de ellas son para encontrar a alguien en la red social, pero una "parte significativa" son esfuerzos por encontrar aplicaciones e información acerca de marcas. "Creo que supone una gran oportunidad y solo nos tenemos que poner a ello", aseguró Zuckerberg.
Facebook estaría en una posición única para construir un motor de búsqueda, ya que tiene una gran cantidad de datos sobre sus 950 millones de usuarios. Motores de búsqueda como Google y Bing de Microsoft han evolucionado para incorporar características sociales, pero no está claro si un motor de Facebook tendría el mismo aspecto que ellos u otro completamente distinto.
A pesar de la insistencia por parte del entrevistador, el fundador y exeditor de TechCrunch Michael Arrington, Zuckerberg negó que Facebook estuviera trabajando en un teléfono. Aunque esto se ha rumoreado muchas veces durante los últimos años, Zuckerberg señaló que crear un teléfono "siempre ha sido la estrategia equivocada" para Facebook. "Hacer un teléfono no tiene ningún sentido", aseguró.
Incluso si la empresa construyera un teléfono y 10 millones de personas lo utilizaran, "no nos beneficiaría", indicó Zuckerberg , y agregó que Facebook está más interesada en la construcción de una red social que esté lo más profundamente integrada que sea posible con todos los dispositivos que sus usuarios quieran utilizar.
Zuckerberg también señaló que aunque él ya no escribe código en Facebook -puesto que la compañía tiene una regla por la que cada cual debe mantener su propio código y él no quería que otra gente tuviera que ser responsable del suyo- aún sigue programando por diversión.
Además, señaló que su código a veces funciona mal. "Todo lo que hago se rompe en algún momento", aseguró. "Pero lo arreglamos rápidamente".
Zuckerberg también habló sobre las acciones de Facebook, que han caído a la mitad desde que la compañía comenzara a cotizar públicamente, y señaló que el rendimiento ha sido "decepcionante". Aseguró que algunas personas subestiman a la empresa en este momento, pero prefiere ser subestimado a sobreestimado, ya que eso da a la compañía la libertad de hacer cosas que exciten y sorprendan a la gente.
"Cuando miremos hacia atrás, 10 o 20 años más tarde, el legado de esta empresa debería ser haber conectado a todas las personas del mundo, y que todos puedan compartir lo que quieren. Y eso es mucho", afirmó.
Quizá sus declaraciones han aliviado las preocupaciones de algunos inversores: las acciones de Facebook subieron más de un 3 por ciento en operaciones posteriores al cierre.