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Cadenas de bloques y aplicaciones

Descentralización contra regulación: el debate de las criptomonedas en 2023

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Este año habrá una lucha por el alma de las finanzas descentralizadas

  • por Mike Orcutt | traducido por Ana Milutinovic
  • 23 Diciembre, 2022

Este reportaje es parte de la serie What's Next (¿Qué sigue?) de MIT Technology Review, donde se analizan las industrias, tendencias y tecnologías para saber qué esperar en el próximo año.

La repentina implosión del mes pasado de la popular plataforma de intercambio de criptomonedas FTX ha intensificado una guerra política por el alma del criptomundo que ya estaba en marcha.

En el próximo año, es probable que veamos como esa lucha alcanza un punto crítico en los tribunales de EE UU y en el Congreso. El futuro de las finanzas pende de un hilo.

Las líneas de batalla son complicadas, pero hay dos bandos destacados. Una multitud ruidosa de escépticos de las criptodivisas, que incluye a conocidos políticos y reguladores y quiere controlar una industria que considera invadida por el fraude y dañina para los consumidores. La catastrófica desaparición de FTX ha alentado más a este grupo.

Luego están los defensores de la "descentralización". Los miembros de este grupo tienden a creer que las redes de criptomonedas como Bitcoin y Ethereum, dado que son accesibles para cualquier persona con conexión a internet y están controladas por redes públicas en vez de las empresas, gobiernos o bancos, son vitales para el futuro de la privacidad y la libertad financiera. Les preocupa que los intentos equivocados de regulación puedan poner en peligro esas libertades.

Para este grupo, el colapso de FTX es una prueba más de que el control centralizado es peligroso y un recordatorio de por qué nacieron las criptomonedas. Su objetivo es un sistema financiero basado en blockchain o cadenas de bloques que sea más accesible y privado que el tradicional, al que consideran plagado de vigilancia e intermediarios que buscan su propio beneficio.

La verdad es que los legisladores tenían las criptomonedas en la mira mucho antes de la debacle de FTX. Las discusiones en los tribunales y los debates en el Congreso de EE UU que veremos en 2023 iban a ocurrir de todos modos. Y dado el papel descomunal que tiene Estados Unidos en el sistema financiero mundial, los resultados de estas luchas tendrán consecuencias globales.

Para aquellos que ven las cadenas de bloques abiertas como cruciales para el futuro de las finanzas, nunca ha habido tanto en juego. ¿Pueden permanecer firmes y mantener sus sistemas financieros descentralizados libres de los marcos regulatorios tradicionales? ¿Lograrán los políticos profesionales dominar estas plataformas imponiendo cierto grado de centralización? Estas preguntas han persistido sobre las criptomonedas durante años y estamos a punto de tener respuestas.

"El ‘criptomundo’ que hemos creado"

Los detalles del colapso de FTX son complicados y aún están saliendo a la luz. Su fundador y CEO, Sam Bankman-Fried, ha sido acusado en Estados Unidos de cargos de fraude y blanqueo de dinero. Es difícil saber qué nivel de culpa tiene su criptomoneda.

Aunque los entusiastas de las criptomonedas en la actualidad pueden estar inclinados a distanciarse de FTX, este episodio refleja "el criptomundo que hemos creado", según afirma Neha Narula, directora de la Iniciativa de Moneda Digital (DCI, por Digital Currency Initiative) del Massachusetts Institute of Technology (MIT).

Para empezar, según la experta, la industria depende demasiado de las casas de intercambio centralizadas como FTX. Pero el problema no es sólo la centralización. "También es esta economía de casino basada en tokens", señala Narula.

Como muchas cripto-empresas, FTX creó su propia criptodivisa. Lo que inició la reacción en cadena que deshizo la plataforma de intercambio fue que CoinDesk informó a principios de noviembre que una empresa comercial afiliada de FTX, Alameda Research, tenía una parte significativa de su dinero en esa moneda, llamada FTT. Según explicó CoinDesk, Alameda, que se creía que tenía más de 10.000 millones de dólares (9.393 millones de euros) en activos, descansaba sobre "una base compuesta en gran parte por una moneda que inventó una empresa hermana, no un activo independiente como una moneda fiduciaria u otra criptodivisa". Esta revelación desencadenó una serie de acontecimientos que finalmente provocaron la caída en picado del valor de FTT.

De hecho, toda la industria ha construido un "ecosistema autorreferencial" sobre "tokens ambiguos" creados "de la nada", con "argumentos muy vagos de por qué deberían tener algún valor", detalla Narula. El token FTT es solo una de las miles de criptomonedas.

La ambigüedad de estos tokens es una de las principales razones por las que los reguladores se están centrando en un área emergente del cripto-mundo conocida como finanzas descentralizadas o "DeFi".

Descentralizar

Sigamos con FTT como ejemplo. En EE UU, no es posible comprar FTT en una plataforma de intercambio centralizada. Eso es porque probablemente si una casa de  intercambio lo ofreciera, correría el riesgo de tener problemas con la Comisión de Bolsa y Valores de EE UU (SEC, por sus siglas en inglés).

La misión de la SEC es proteger a los inversores que participan en los mercados de activos financieros. Lo hace al exigir que las empresas que venden estos activos se registren en la agencia y presenten información detallada sobre sus finanzas.

El presidente de la SEC, Gary Gensler, ha expresado que cree que muchas de las criptomonedas en circulación son valores y deben ser reguladas como tales, lo que implica que las organizaciones que ofrecen esos activos a los estadounidenses lo hacen de manera ilegal. Dado que FTT se parece a las acciones de FTX en aspectos importantes, es probable que entre en esta categoría.

Pero aunque el Gobierno de EE UU puede evitar que las casas de intercambio centralizadas incluyan valores no registrados, no puede evitar que los intercambios que se ejecutan completamente en una cadena de bloques permitan a las personas intercambiar esos valores.

Los intercambios descentralizados, o DEX, son fundamentales para el mundo de rápido crecimiento de DeFi. El DEX más destacado es Uniswap, que registra más de mil millones de dólares  de transacciones diarias. Uniswap es un conjunto de contratos inteligentes (básicamente, programas informáticos que se almacenan y ejecutan en la cadena de bloques de Ethereum) que permiten a cualquier persona con conexión a internet comprar y vender una amplia variedad de criptomonedas, independientemente de cómo las clasifiquen los reguladores.

Los defensores de DeFi han señalado a FTX como la última evidencia de que lo que necesitamos es un sistema financiero alternativo, "abierto" y descentralizado. Las apps DeFi verifican las cripto-transacciones y todo se registra en la cadena de bloques. No hay intermediarios corruptibles.

Sin embargo, ahí radica el problema con las apps financieras descentralizadas, al menos a los ojos de los formuladores de políticas: si realmente no hay nadie en el medio, no hay nadie a quien regular. ¿Cómo pueden los reguladores vigilar el comercio de valores en las plataformas descentralizadas? ¿Cómo se aseguran de que no se utilicen fondos ilícitos?

Este desafío explica por qué los llamados "front ends de DeFi" son un tema candente y que puede explotar en el año que viene.

Los front ends son el término con el que se conocen en la industria las interfaces de usuario basadas en web, a través de las cuales la mayoría de las personas acceden a los protocolos DeFi, ya que hacerlo de otra manera requiere unos conocimientos técnicos especializados. En el caso de Uniswap, la start-up Uniswap Labs creó y mantiene su propio front end.

La gran pregunta es si se debe exigir a los front ends DeFi una licencia gubernamental, según explica Stephen Palley, socio de la firma de abogados Brown Rudnick y copresidente del grupo de comercio digital de la firma. Rudnick no lo cree necesario, al menos no en todos los casos.

"Si creo un sitio web y todo lo que hago es dar a las personas la capacidad de interactuar con otro software que alguien creó y que ya existía en una base de datos distribuida globalmente, con la que ya podían interactuar, ¿cómo es que he creado una bolsa de valores?", explica Rudnick.

La popularidad de las finanzas descentralizadas se ha disparado en los últimos dos años, pero sigue siendo algo muy de nicho y, sobre todo, para inversores. Todavía no ha cumplido sus promesas más idealistas. Los defensores argumentan que regular los front ends podría ser fatal para las DeFi porque agregaría una barrera de entrada que se suponía que las cadenas de bloques debían eliminar.

Parece seguro decir que el hecho de que los reguladores obtengan el control de este importante punto de acceso de DeFi tendrá una profunda influencia en cómo evoluciona la tecnología subyacente a partir de ahí. No habrá que sorprenderse si los reguladores toman algún tipo de acción pronto, cree Palley y añade que es probable que esta pelea se desarrolle en los tribunales durante los próximos dos años. El Congreso de EE UU también se podría involucrar.

Peligro de tornado

Los defensores de DeFi también se enfrentan a los reguladores en otro frente, en el cual el principal problema en cuestión es la privacidad. En ninguna parte hay más en juego para el futuro de los sistemas financieros descentralizados que en el caso de Tornado Cash.

Al igual que Uniswap, Tornado Cash es un conjunto de contratos inteligentes en la cadena de bloques de Ethereum. Permite a los usuarios depositar criptomonedas en un fondo de dinero digital de otras personas y luego retirarlo a una dirección diferente, utilizando unas técnicas avanzadas cripto, llamadas pruebas de conocimiento cero, para garantizar que no haya un vínculo público entre la dirección de depósito y la de retirada. Eso significa que el dinero ya no está vinculado en la cadena de bloques a las transacciones anteriores del usuario, lo que dificulta el seguimiento y proporciona un nivel de privacidad.

En agosto, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de EE UU sancionó a 45 direcciones de Ethereum asociadas con esta plataforma, prohibiendo, en la práctica, utilizarla en EE UU y reduciendo su base de usuarios. La agencia explicó que había tomado esa medida porque Tornado Cash se había utilizado para "blanquear" miles de millones de dólares, incluidos cientos de millones robados por los hackers patrocinados por Corea del Norte.

OFAC ya había sancionado antes otras direcciones de cadena de bloques asociadas con personas extranjeras, pero nunca había sancionado un smart contract (o contrato inteligente, que es como se denomina a este tipo de intermediación). Tampoco tiene la autoridad para hacerlo, según argumenta Peter Van Valkenburgh, director de investigación del grupo de defensa de políticas Coin Center. Como señala este centro, muchos de los contratos sancionados por la OFAC no pueden ser modificados, bloqueados o desactivados por ninguno de los desarrolladores de Tornado Cash, ya que existen independientemente de la intervención humana.

Si bien la OFAC tiene el poder legal para sancionar a las personas y a ciertas entidades extranjeras, no puede prohibir que los estadounidenses usen una herramienta como Tornado Cash, según Van Valkenburgh. " El Congreso nunca tuvo la intención de que el estatuto que otorga poder a la OFAC se use para decirles a los estadounidenses qué herramientas de software pueden usar y cuáles no", asegura.

Coin Center ha presentado una demanda contra el Departamento del Tesoro de EE UU con el objetivo de revertir las sanciones y evitar que el Departamento del Tesoro "ejerza contra los derechos básicos, ordinarios y evidentes a la privacidad". Además de argumentar que la OFAC no tiene la autoridad para prohibir las herramientas de software, Coin Center también argumenta que las sanciones violan la Constitución de EE UU. Coinbase, la popular plataforma estadounidense de intercambio de criptomonedas, ha financiado una demanda similar contra el Departamento del Tesoro estadounidense.

Después de las sanciones, GitHub borró el código fuente del proyecto y el sitio web tornado.cash fue eliminado. Aparte de las acciones de la OFAC, las autoridades holandesas detuvieron a uno de los programadores de Tornado Cash, Alexey Pertsev, y el fiscal lo acusó de facilitar el blanqueo de dinero.

Pertsev fue uno de los fundadores de Tornado Cash. Pero como la mayoría de los criptoproyectos, Tornado Cash es de código abierto y se basa en un colectivo de contribuyentes poco unidos. Otro de los cofundadores, Roman Semenov, no respondió a la solicitud de comentarios.

Todo el criptomundo sigue de cerca la saga Tornado Cash, porque pase lo que pase dará forma al futuro de las finanzas online"Un programador no debe ser tratado como un intermediario financiero solo por escribir código y ponerlo en internet", opina Narula. Hay muchos pasos entre hacer eso y ejecutar un servicio, resalta la experta.

¿En qué momento una app financiera pasa de ser un simple código en nternet a ser un servicio? Esa es también la pregunta central del conflicto sobre front-ends de DeFi.

Lo que está en juego en ambos casos es la libertad de usar un servicio basado en blockchain sin pedir permiso al gobierno. Algo que sí podemos esperar es que los verdaderos creyentes de las criptomonedas lucharán con todo lo que tienen para mantener esa libertad.

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