No cabe duda de que la salud ha sido la protagonista en 2020. La pandemia de coronavirus (COVID-19) no solo nos ha obligado a revalorar la importancia de una atención sanitaria de calidad sino, también, a impulsar la búsqueda de innovaciones capaces de dar respuesta a los retos presentes y futuros de la salud. Ese fue precisamente el objetivo de las reciente Jornadas de Innovación Biosanitaria organizadas por Roche Farma España y el Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria (IMIB), que se celebró bajo el lema "Zinkinn, liderando la innovación".

Además de agradecer a los profesionales sanitarios su labor durante la pandemia, el director del área de Regional Access and Business de Roche Farma, José Miguel Roca, sentenció que la misión de la farmacéutica es clara: "Hacer hoy lo que el paciente va a necesitar en el futuro". Durante su charla inaugural, señaló que, para lograr esta meta, "el 20 % de la facturación se reinvierte en investigación y desarrollo".

Se trata de "innovar y transferir", tal y como lo resumió el director científico del IMIB, Pablo Ramírez, a los más de 150 inscritos que disfrutaron del evento en formato virtual. Las jornadas estuvieron marcadas por una clara disposición a trabajar colaborativamente, a transferir el conocimiento y a seguir logrando avances en el área biosanitaria para mejora la vida de los enfermos.

Foto: José Miguel Roca; director del área de Regional Access and Business de Roche Farma

Antes de la presentación de los ponentes, la directora general de Investigación e Innovación Científica de la Región de Murcia, Isabel Fortea, y la directora general de Planificación, Investigación, Farmacia y Atención al Ciudadano de la Consejería de Salud de la Región de Murcia, María Teresa Martínez, comentaron el tiempo, esfuerzo, coordinación e inversión que se requiere para tener un sistema científico robusto, así como la necesidad de innovar en los servicios de salud pública para mejorar la calidad de la atención médica.

Tecnología e innovación para la salud

Las distintas intervenciones de los expertos dejaron claro que la tecnología es la palanca de aceleración por excelencia en el ámbito sanitario. En concreto, en los próximos años "la inteligencia artificial (IA) es una de las tecnologías que más impacto va a tener en la salud", aseguró la jefa de redacción de MIT Technology Review en español, Marta del Amo, durante su ponencia sobre las 10 Tecnologías Emergentes de 2020 de su medio de comunicación.  

Esta tecnología es una de las responsables de uno de los 10 avances seleccionados por la revista este año: la medicina hiperpersonalizada. "La medicina personalizada es una de las grandes tendencias transformadoras del cuidado de la salud y una palanca importantísima para la adopción de la innovación por parte del sistema sanitario", confirmó la Head of Personalized Healthcare de Roche Farma, Teresa Ramos, durante su intervención.

La responsable hizo un repaso de los ejes más destacados con los que la medicina personalizada está generando un gran impacto positivo: el conocimiento exhaustivo del paciente a nivel genómico, las biopsias líquidas, las herramientas de apoyo a la decisión clínica, así como la extracción y el uso de datos de los distintos tipos de imágenes médicas.

Pero, la tecnología no basta para lograr todos estos avances. Para que realmente pueda aportar todos sus beneficios, Ramos destacó la importancia de innovar en los datos de vida real. La multitud de fuentes de información médica suele proporcionar estos datos sin un orden concreto, lo que impide su compartición y análisis adecuado.

Para evitar perder su valor, la responsable incidió en la necesidad de generar bases de datos estandarizadas que permitan la interacción de toda esta información y el trabajo colaborativo entre profesionales que la usen. Y concluyó afirmando que "esta es la hoja de ruta que ha establecido Roche para ir aportando soluciones con el fin de que esa innovación llegue a todos los pacientes".

La importancia de equivocarse

La tecnología no es la única herramienta capaz de fomentar el avance de la salud. Aunque parezca contradictorio, los fracasos también lo son. Así lo reconoció el CEO de Made of Genes, Óscar Flores, para quien "emprender es fracasar de forma disciplinada". Su doble experiencia como científico y empresario le enseñó la importancia de normalizar el fracaso para aprender de los errores cometidos. Pero los errores no son los únicos elementos que han cimentado la trayectoria de Flores. El emprendedor también destacó la superación de obstáculos para facilitar la implementación de la innovación.

Consciente de que no todos los avances acaban aportando su potencial a la sociedad, el doctor del Servicio de Oncología del Hospital Universitario Morales Meseguer, Francisco Ayala, sentenció: "Queremos que la innovación se traduzca en resultados para los pacientes". En su opinión, la innovación en el ámbito asistencial centrada en el cuidado del cáncer debe suponer una diferencia significativa para los enfermos. En otras palabras, en mejorar su supervivencia y calidad de vida.

En su opinión, aunque la tecnología aplicada al sector oncológico ha experimentado grandes avances, no están ocurriendo en el ritmo ni en la forma en la que deberían. Y resaltó los tres grandes obstáculos que están impidiendo que la innovación penetre en el ámbito asistencial: el impacto económico y la regulación, los problemas crónicos del sistema sanitario público y el bajo nivel de orientación a la investigación que hay dentro de este sistema.

Para dar solución a las barreras expuestas, Ayala propuso varias recomendaciones centradas en el uso de datos y la tecnología, en el diseño de estrategias para recibir la innovación, en la reforma del sistema sanitario, y en prestar una especial atención a la educación y formación.

El papel de las instituciones

Pero el avance de la salud no vive solo de innovadores incansables. Para que su labor avance, su trabajo requiere el apoyo de las distintas instituciones. Este fue el tema abordado durante el último bloque de Zinkinn, que estuvo conformado por un panel de debate con representantes institucionales de la región, moderado por la responsable de Innovación del IMIB, María del Mar Vázquez de Parga.

Para el Instituto de Fomento de la Región de Murcia, el campo de la salud ha cobrado un papel muy relevante dentro de los mercados financieros. Su director, Diego Rodríguez-Linares, afirmó: "Este ha sido uno de los sectores de mayor crecimiento económico en los últimos años", y reiteró el apoyo que el instituto seguirá prestando para facilitar el tránsito de conocimiento hacia las empresas.

Este reposicionamiento de la salud como impulsor económico ha dado lugar un escenario idóneo para fomentar la innovación y la investigación. Así lo afirmó la vicerrectora de Investigación y catedrática de bioquímica en la Universidad Católica de San Antonio (Murcia, España), Estrella Núñez. No obstante, aunque se han dado pasos muy importantes, recalcó la importancia de "fomentar la investigación traslacional a través de la colaboración público-privada" para que el conocimiento llegue a la población.

"Hay que implicar más a la empresa privada, debe desarrollar un papel fundamental en la investigación biosanitaria, en la innovación", sentenció el vicerrector de Transferencia y Divulgación Científica y catedrático de bioquímica y biología molecular en la Universidad de Murcia, José Manuel López.

La urgencia de implicar más a la empresa privada nace del hecho de que las universidades politécnicas ya tienen implícito en su ADN la transferencia de ese conocimiento, afirmó la rectora de la Universidad de Cartagena (Murcia), Beatriz Miguel. Para la responsable, este genoma es perfectamente palpable en la educación que imparten a ingenieros, perfiles necesarios para desarrollar maquinaria compleja en el sector de la salud en combinación de las tecnologías más utilizadas.

La mesa redonda la cerró el coordinador regional de terapias avanzadas de la Consejería de Salud de la Región de Murcia y en el servicio murciano de salud, Vicente Arocas, quien puso énfasis en el plan estratégico regional que están desarrollando y que tiene como fin incorporar estrategias avanzadas de manera sostenible y planificada y también "proveer herramientas que garanticen la calidad, equidad y la seguridad en el acceso a nuevos tratamientos".

Foto: Participantes de la mesa redonda.

El evento finalizó con una ronda de preguntas del público, en la que los expertos de la mesa redonda dejaron claro que, para facilitar la transferencia del conocimiento, no solo hacen falta mecanismos de financiación, también es necesaria la formación de equipos de investigación multidisciplinares capaces de fomentar el trasvase de información entre los propios científicos.

Puede que la tarea de convertir los avances científicos y tecnológicos en beneficios reales para los pacientes todavía tenga trabajo por delante. La financiación, la colaboración público-privada y los equipos multidisciplinares resultarán claves para lograrlo. No obstante, la meta está cada vez más cerca gracias encuentros como Zinkinn, donde la innovación no solo lidera, también se impulsa.