Reino Unido reclutará a hasta 50 jóvenes sanos a los que infectará deliberadamente con la COVID-19 para acelerar la investigación sobre la enfermedad y sus posibles vacunas y tratamientos. Aunque el ensayo los aislará y monitorizará constantemente, correrán el riesgo de enfermar gravemente y de fallecer
La noticia: Algunas personas jóvenes y sanas serán infectadas deliberadamente con coronavirus (COVID-19) en el primer ensayo de los denominados de desafío humano, que comenzará en un hospital de Londres (Reino Unido) en enero. El estudio, anunciado el martes, reclutará hasta 50 voluntarios sanos de entre 18 y 30 años.
El Gobierno de Reino Unido se ha comprometido a invertir 37 millones de euros en esta prueba, que se llevará a cabo en colaboración con la empresa hVIVO, que tiene experiencia en ensayos de exposición al virus en humanos. Y, si obtiene la aprobación ética y reglamentaria, se llevará a cabo en el Royal Free London NHS Foundation Trust. A los voluntarios se les pagará, se les aislará durante el estudio y se les monitorizará hasta un año después para poder detectar algún posible efecto secundario.
¿Para qué? Se espera que este ensayo facilite el estudio más detallado de la enfermedad, con el objetivo de acelerar el desarrollo de una vacuna. En la primera fase del ensayo, los investigadores intentarían determinar el nivel de exposición mínimo necesario para que alguien contraiga la COVID-19. A continuación, podrían probar si una vacuna previene la infección. También podrían explorar otros posibles tratamientos y analizar la respuesta inmunitaria. La ventaja de este enfoque es que permite a los investigadores estudiar los candidatos a vacunas en paralelo para ver cuál es el más eficaz.
"La infección deliberada de voluntarios con un patógeno humano conocido nunca se toma a la ligera. No obstante, estos estudios esclarecen muchísimo la información sobre una enfermedad, incluso una tan bien estudiada como la COVID-19. Resulta realmente vital avanzar lo más rápido posible para conseguir vacunas y otros tratamientos efectivos para la COVID-19, y los estudios de este tipo tienen el potencial de acelerar el desarrollo de nuevos medicamentos y vacunas y reducir el riesgo", aseguró el investigador del estudio del Imperial College de Londres Peter Openshaw, en un comunicado.
La controversia: Existen riesgos obvios relacionados con este enfoque. Los voluntarios podrían enfermar gravemente e incluso morir. Ya se están realizando grandes ensayos para probar algunos tratamientos y vacunas en personas que han contraído la COVID-19 de forma natural. Y como el estudio de desafío humano no comienza hasta enero, es posible que ya estemos cerca de tener una vacuna eficaz para entonces.