Realidades transmitidas por streaming en el salón, videos HD en dispositivos móviles, robots quirúrgicos controlados por cirujanos a través de internet. Si no existieran ciertos obstáculos físicos, estas ideas serían posibles gracias a las conexiones de fibra óptica. Tal y como explica Son Thai Le, ingeniero electrónico de Nokia Bell Labs en Stuttgart (Alemania), "el rango de frecuencia de la luz en la que podemos enviar datos a través de estas fibras es limitado". Y advierte de que "los rangos de frecuencias utilizables se están acabando lentamente". Especialmente las conexiones de larga distancia a través de cables submarinos entre los continentes, que son extremadamente caros, podrían pronto convertirse en un cuello de botella.

¿Por qué no simplemente enviar más bits por segundo a través de las fibras? "Habría que aumentar la intensidad de los impulsos, pero esto hace que las señales de luz se distorsionen de forma no lineal", explica Le. Este fenómeno impondría un límite a la solución, puntualiza, el supuestamente irrefutable límite de Shannon. Le, sin embargo, ha desarrollado un método que evita hábilmente este límite, lo que le ha supuesto convertirse en uno de los ganadores de los premios Innovadores menores de 35 Europa 2018.

El joven calcula las distorsiones esperadas y da forma a las señales para compensar los efectos de la interferencia. En las pruebas, fue capaz de aumentar la capacidad de las fibras de vidrio individuales en aproximadamente un 50 %. Además, ha desarrollado un método con el que se pueden leer datos de varios canales de frecuencia con un solo fotodiodo. Gracias a esto, ha logrado aumentar la tasa máxima de datos en un canal de frecuencia de 40 gigabytes a 256 gigabytes por segundo: un récord mundial. Para 2025, pretende multiplicar por diez la capacidad de la fibra óptica, sin la necesidad de recurrir a costes adicionales, y así generar ahorros en el ciclo de vida de los datos.

En opinión del emprendedor, inversor y consultor de gestión en TMT Industry, y miembro del jurado de los premios Innovadores menores de 35 Europa 2018, Dariusz Nachyla, no hay duda de que el proyecto de Le está "a la vanguardia de la tecnología" y considera que el impacto de sus invenciones "puede contarse en miles de millones" y "cambiará la industria de las telecomunicaciones".