Los algoritmos de Climate Corporation logran que cada hectárea de terreno produzca 20 fanegas más de cultivo. La empresa ofrece herramientas para que los agricultores puedan anticiparse a las plagas y sepan qué híbridos tendrán el mayor rendimiento en función de cada clima y momento
Aunque la agricultura es un sector en continua evolución, a los agricultores les cuesta mucho recopilar y analizar datos de forma útil. Pero eso está cambiando gracias a una nueva generación de herramientas, que ya están ayudando a aumentar los rendimientos y hacer que la agricultura sea más sostenible, según el director científico de la compañía Climate Corporation, Sam Eathington. Así lo afirmó durante su charla en la reciente conferencia en EmTech de MIT Technology Review, en la que afirmó que en los próximos entre cinco y diez años "vamos a ver una explosión de sensores y recopilación de datos de cultivos" (ver El 'proyecto loco' de Alphabet para revolucionar la agricultura con IA).
La empresa Climate Corporation, fundada en 2006 por un par de antiguos de Google y que ahora pertenece al gigante químico alemán Bayer, ha desarrollado herramientas para reunir información de distintas fuentes, incluidos los sensores de la maquinaria agrícola y los que hay en el propio campo. Después, los datos de estos sensores dispares se analizan en la nube.
La compañía está construyendo modelos de software cada vez más sofisticados que ayudan a los agricultores a comprender qué híbridos de cultivos producirán mayores rendimientos en función de las condiciones climáticas y del suelo, o qué niveles de fertilizantes es el más óptimo en un entorno particular. Otras herramientas como drones, satélites y cámaras de campo también ayudan a los agricultores a detectar y responder a los primeros signos de plagas.
Estos algoritmos ya han ayudado a algunos agricultores a aumentar Los modelos de software de la compañía están ayudando a los agricultores a producir 20 fanegas de cultivo extra por cada hectárea de terreno. Un aumento de este tipo puede suponer una importante mejora económica para el negocio de agricultura, que suele operar con muy poco margen de beneficio, explicó Eathington. Alrededor del 80 % de las veces, los modelos de la empresa superan las recomendaciones de los científicos que estudian la gestión del suelo y la producción de cultivos, añadió.
Además de ayudar a los agricultores a ganarse la vida, este tipo de herramientas también podrían ser cruciales para satisfacer la creciente demanda global de alimentos a medida que la población aumenta y el cambio climático hace que las condiciones sean cada vez más inestables.