Sus nuevos servicios enfocados a la productividad quieren convencer al mercado empresarial dominado por Microsfot y Google
Dropbox, el servicio para almacenar archivos, ha crecido hasta los 300 millones de usuarios sirviéndose de una imagen agradable y un sistema para almacenar y compartir archivos en línea fácil de usar. Pero las últimas jugadas de la compañía tienen más en común con cortejar a empresas de software como Microsoft.
Hace mucho que Dropbox ofrece una versión de su servicio dedicada a las empresas, pero ha evitado presentarse como una compañía para empresas. Sigue sirviendo a consumidores y sacó una nueva función para compartir fotos a principios del año pasado (ver Crítica a Carousel, la aplicación de Dropbox para compartir fotos). Pero este año parece que Dropbox ha pasado a centrarse más en los clientes corporativos. Ha introducido y experimentado con una serie de herramientas de colaboración y productividad pensadas para empresas como los comentarios, la edición de documentos, y un add-on de colaboración para Microsoft Office.
"Nuestros orígenes empiezan con una idea muy sencilla: poder colocar tus cosas en la nube para acceder a ellas desde todas partes", explica el vicepresidente de Ingeniería de Dropbox, Aditya Agarwal, quien supervisa el trabajo que se hace en los productos de la empresa junto con el cofundador, Arash Ferdowsi. "Yo diría que lo que ahora intentamos construir es la próxima generación de cómo sacamos el trabajo adelante juntos".
Un ejemplo reciente de esa estrategia es una función que permite a la gente charlar en comentarios adjuntos a un archivo almacenado en Dropbox. Otro es un trozo de software llamado Badge que aparece cuando alguien abre un documento de Microsoft Office que esté almacenado en una cuenta empresarial de Dropbox, que lanza avisos cuando otra persona empieza a trabajar en el mismo documento y que ofrece un acceso fácil a versiones anteriores de un archivo. En abril, Dropbox confirmó que está probando una herramienta de edición de documentos en línea.
La empresa está añadiendo herramientas de productividad a su servicio de Dropbox for Business para ayudar a sus clientes empresariales a usar sus archivos almacenados más fácilmente, explica Agarwal. Ese servicio lo usan empresas como National Geographic y Under Armour, pero hasta la fecha lo que han hecho principalmente ha sido añadir herramientas de control de acceso a las funciones esenciales de Dropbox para almacenar y compartir archivos. Añadir funciones de productividad abre nuevos mercados, explica. "Si puedes construir un software capaz de aumentar la productividad de la gente en un 5% es una enorme oportunidad".
Es probable que las fortunas de Dropbox decidan qué hace con esa oportunidad. La empresa ha reunido 1.100 millones de dólares de inversores (unos 980 millones de euros) y se espera que salga a bolsa en un futuro no muy lejano. Ahora mismo obtiene algunos ingresos de cobrar a sus clientes por almacenar más de dos gigabytes de datos. Pero no se sabe cuántos consumidores están dispuestos a pagar por ello. Dropbox ofrece menos espacio libre que los servicios de almacenamiento en nube de Apple, Google y Microsoft, que también cobran menos por el espacio extra y promueve e integra sus servicios en sus sistemas operativos móviles y de sobremesa. (Dropbox afirma que sus precios son competitivos y que proporcionan una mejor calidad de servicio). El mercado empresarial para herramientas de productividad y colaboración es mucho más lucrativo.
Sin embargo, ese mercado está lleno de grandes empresas como Microsoft, IBM y Google, así como empresas más jóvenes como la recién salida a bolsa Box y start-ups como Slack. La directora de investigación de IDC Vanessa Thompson afirma que Dropbox tiene que poner su oferta, que empezó siendo sencilla, al día con los paquetes de productividad multifunciones que presentan empresas como Microsoft, IBM y Google que actualmente dominan el mercado. "Estas cosas están ya sobre la mesa como un mínimo exigible, porque compiten con los paquetes más grandes que ya tienen este tipo de funciones", afirma.
A pesar del rápido crecimiento y el perfil destacado de empresas jóvenes como Dropbox, los paquetes de productividad ya consolidados están acaparando los nuevos negocios en el mercado global, que no para de crecer, afirma Thompson. En junio del año pasado, IDC predijo que se invertirían 10.000 millones de dólares (unos 8.900 millones de euros) en herramientas de colaboración empresariales en 2014 (el equivalente para sincronización y compartir archivos era de 940 millones de dólares, unos 836 millones de euros). Los recién llegados, que son más pequeños, pregonan la sencillez de su oferta, pero las grandes empresas que son las que más dinero dedican a este tipo de servicios, necesitan herramientas de productividad expansivas y con todas las funciones, sostiene Thompson.
Un punto a favor de Dropbox es que ha conseguido atraer a una extensa comunidad de desarrolladores que han integrado sus propios productos con el servicio, lo que ha servido para ampliar sus funciones de forma gratuita. Hasta la fecha se han hecho más de 300.000 integraciones de este tipo. En 2013, Dropbox compró una aplicación de correo electrónico móvil, Mailbox, que aún no está integrada en su servicio pero que acabará estándolo.
Agarwal reconoce que las nuevas herramientas de productividad de Dropbox se enfrentan a una competencia importante. Pero afirma que igual que la empresa ha conseguido ganarse la confianza de millones de consumidores con un servicio bien diseñado que se dio a conocer por el boca a boca, puede atraer a clientes empresariales con herramientas mejores.
"Que algo exista no significa que la gente quiera usarlo, hay que crear algo que es sencillo, fiable y comprensible", afirma Agarwal. Las nuevas herramientas de productividad que están diseñando sus ingenieros son del tipo que la gente puede descubrir y usar mientras trabajan, detalla. "Funciones como Badge no requieren que el usuario cambie el flujo de trabajo para instalar nuevo software, simplemente aparece y proporciona un contexto útil dónde y cuándo lo necesitas".
Aún así, y a pesar del énfasis que están poniendo sobre las nuevas herramientas empresariales, Agarwal sostiene que su empresa seguirá dedicada a los consumidores. "Tenemos un buen producto de partida, pero ahora está evolucionando de tal forma que nos permite abordar no uno, sino dos mercados muy grandes", afirma. "Puede que en cierto sentido el de la productividad se comprenda mejor, pero por el lado de los consumidores habrá 5.000 millones de personas usando dispositivos móviles, enfrentados al reto de tener todas sus cosas donde las quieren".