Cambio Climático
La desastrosa gestión del gigante solar SunEdison lo lleva al borde de la bancarrota
El que fuera uno de los nombres más importantes de la energía solar se enfrenta a querellas, deudas enormes y la posible quiebra
Las acciones de SunEdison habían subido más de un 10% el pasado martes tras la cancelación de la adquisición desatrosa del gigante desarrollador solar residencial Vivint. El acuerdo de 2.200 millones de dólares (unos 2.000 millones de euros) se derrumbó después de que el multimillonario gestor de fondos de alto riesgo David Tepper presentara una demanda para bloquearlo. Pero la causa real tuvo menos que ver con las protestas de Tepper y más con la debacle financiera generalizada de SunEdison.
A pesar del alza del precio de sus acciones, la atribulada empresa de Misuri (EEUU) se encuentra lejos de recuperarse. SunEdison, que ha visto cómo se evaporaban 10.000 millones de dólares (unos 9.100 millones de euros) en valor de mercado durante el último año, ha sido calificada, con razón, como "la implosión corporativa más grande de la historia solar de Estados Unidos"; la prueba de que su estrategia de adquirir cada empresa de energía solar no ha dado resultado. Bajo la dirección del CEO Ahmad Chatila, la empresa ha gastado miles de millones de dólares en la adquisición de desarrolladores solares por todo el mundo, acumulando en el proceso casi 12.000 millones de dólares (unos 11.000 millones de euros) en deudas.
La compleja estructura financiera de la empresa sólo está empeorando la situación. En 2014, SunEdison creó un par de "yieldcos", filiales de cotización pública creadas para proyectos solares completados. Las yieldcos se han convertido en una estructura preferente de las grandes empresas solares por los créditos fiscales y el flujo de caja que proporcionan, pero, al menos en el caso de SunEdison, Wall Street ha perdido fe en la estrategia. El desplome de sus acciones dejó a SunEdison incapaz de cargar con la compra de Vivint ni de completar otros acuerdos firmados.
Crédito: Dennis Schroeder (Departamento de Energía de Estados Unidos).
Ahora, con casi total seguridad, la empresa se enfrentará a una querella de Vivint. Ya ha sido demandada por Latin America Power, que acordó comprar por 733 millones de dólares (unos 668 millones de euros), y se enfrenta a millones de dólares en multas por la cancelación de unos proyectos planificados para Hawaiian Electric.
La empresa también ha retrasado su informe de resultados de 2015 mientras lleva a cabo una investigación interna sobre la precisión de sus declaraciones financieras. En un comunicado, la empresa dijo que esa investigación podría provocar que la empresa "reevalúe su posición de liquidez". En otras palabras, SunEdison, antaño el desarrollador más importante del mundo de proyectos de energías renovables (y el número seis de la lista de las 50 empresas más inteligentes de 2015 de MIT Technology Review), podría declararse en bancarrota muy pronto.
(Lean más: Reuters, Bloomberg, Wall Street Journal)