.

Cambio Climático

¡Que no cunda el pánico! Aún no es demasiado tarde

1

Nunca es demasiado tarde hasta que lo sea, la vida sigue hasta que no lo haga. Tenemos que decidir cuál será nuestro próximo paso contra el cambio climático

  • por Jason Pontin | traducido por Teresa Woods
  • 28 Diciembre, 2015

Foto: Jason Pontin, editor de MIT Technology Review

No recuerdo la primera vez que oí hablar del cambio climático. Fue antes de que testificara Jim Hansen, el entonces director del Instituto para Investigaciones Espaciales de la NASA en Manhattan (EEUU), ante el Congreso de Estados Unidos el 23 de junio de 1988. Entonces, le contó al comité del senado sobre Energía y Recursos Naturales: "Es hora de dejar de vacilar tanto y decir que las pruebas de que ha llegado a producirse el efecto invernadero son bastante fuertes".

Tengo 48 años; llevo escuchando hablar del cambio climático la mayor parte de mi vida. Hemos estado vacilando todo este tiempo. Pero hasta hace poco, existía un sentimiento, por muy incipiente que fuera, de que aún podríamos evitar unos cambios significativos si tomábamos medidas. Ahora les ha quedado claro a todos menos a los escépticos más empedernidos del cambio climático, que lo que Hansen le contó al congreso en 1998 es cierto: el cambio climático ha llegado. Como escribió Ken Caldeira, un científico climático del Instituto Carnegie para la Ciencia, en Mejor evitarlo que limpiarlo. Reducir las emisiones de CO2 es la medida más importante, parte de nuestra cobertura del cambio climático: "Ya, en las latitudes medias del hemisferio norte, las temperaturas medias están subiendo a un ritmo que es el equivalente a trasladarse al sur unos 10 metros al día". No actuamos a tiempo.

Lo que queda por descubrir es la gravedad de los cambios, lo rápido que se producirán y lo que haremos al respecto. El primer gran desconocido es lo rápido que abandonaremos el carbón, el petróleo y el gas natural. Si quemamos todos los recursos disponibles de combustibles fósiles y vertimos el dióxido de carbono restante a la atmósfera, las temperaturas medias globales podrían subir hasta unos 9 °C; puede que los mamíferos en el cinturón de la Tierra no consigan sobrevivir.

Probablemente no sucederá eso, pero para limitar la subida de las temperaturas, debemos desplegar lo antes posible las tecnologías energéticas bajas en carbono que sí entendemos, como la energía solar y la eólica, mientras investiguemos y desarrollemos soluciones para los problemas energéticos que aún nos eluden, como el almacenaje de la electricidad generada por fuentes renovables o cómo generar energía de unos reactores nucleares más seguros y baratos. Estos esfuerzos requerirán unas inteligentes políticas energéticas, unos tratados internacionales y un aumento importante del dinero que gastan las naciones en labores de I+D energéticas.

Otros factores desconocidos son la sensibilidad del clima a los aumentos del dióxido de carbono atmosférico y el impacto que tendrán esas subidas de temperatura. David Rotman, redactor de MIT Technology Review, afirma (ver Guerras: el efecto oculto del cambio climático): "Nadie sabe cómo el cambio climático transformará nuestras vidas. No sólo es algo incierto cuánto los elevados niveles de dióxido de carbono de la atmósfera harán subir las temperaturas y afectarán la precipitación en diferentes partes del mundo, pero sigue quedando mucho por aprender acerca de cómo estos cambios reducirán la productividad agrícola, dañarán la salud humana y afectarán el crecimiento económico". ¿Podría el cambio climático, pregunta Rotman, "dar paso a un mundo mucho más violento?"

Al menos 2 °C de calentamiento global, que antes se consideraba el umbral máximo de lo que nosotros, como civilización, podríamos aguantar, ahora parece estar garantizado. Puede que sea probable incluso una subida mayor. Debemos empezar a imaginarnos las implicaciones sociales, económicas, agrícolas y de ingeniería de vivir en ese futuro, y prepararnos en consecuencia. Hará más calor; los océanos subirán e inundarán las ciudades; habrá más sequías y tormentas, y las cosechas fracasarán; las naciones lucharán entre sí; y los refugiados abandonarán las partes más pobres del mundo.

Frente a todo esto, resulta fácil recordar las palabras de Job 3:25: "Pues lo que temo viene sobre mí, y lo que me aterroriza me sucede". Pero nunca es demasiado tarde hasta que sea demasiado tarde; la vida sigue hasta que no lo haga. Tenemos que decidir cuál queremos que sea nuestro próximo paso. Es una imperativa moral y la realidad práctica. Que no cunda el pánico.

Escríbame y cuénteme su opinión: jason.pontin@technologyreview.com.

Cambio Climático

  1. La lección alemana: por qué es pronto para dejar de subvencionar el coche eléctrico

    Apoyar las nuevas tecnologías puede resultar caro, pero decidir cuándo dejar de incentivarlas puede ser un difícil ejercicio de equilibrismo

  2. Google lidera una alianza espacial para luchar contra el fuego

    El sistema completo FireSat debería ser capaz de detectar pequeños incendios en cualquier parte del mundo y proporcionar imágenes actualizadas cada 20 minutos

  3. Reino Unido quiere crear una alarma para detectar los puntos de no retorno climático

    La Agencia de Investigación e Invención Avanzadas (ARIA) aporta 81 millones de libras para que equipos científicos busquen señales reveladoras de cambios climáticos en espiral